La pol¨ªtica como pretexto

Hay un cine pol¨ªtico estricto, incluso militante, perfectamente leg¨ªtimo y -sobre todo en ciertas ¨¦pocas, como la que vivimos los ciudadanos de este sufrido pa¨ªs- hasta necesario. Junto a ¨¦l existe tembi¨¦n un cine pol¨ªtico comercial y oportunista que se le parece en los temas y, aparentemente, en las situaciones y objetivos. Queremos los coroneles pertenece a este ¨²ltimo grupo y ni siquiera el oficio de su director, Mario Monicelli, ha sido suficiente para moderar la astracanada y el exceso que son sus notas distintivas. Los cuatro a?os pasados desde su estreno han apagado sus aspectos m¨¢s pol¨¦micos y defendibles, para destacar, por ¨²ltimo, los elementos pat¨¦ticos y caricaturescos de esta historia de militares de extrema derecha que se preparan para dar un golpe de Estado.El peor defecto del filme, a mi modo de ver, es su estilo humor¨ªstico: directo, de brocha gorda, exagerado. Se podr¨ªa objetar que los fascistas son, tambi¨¦n, excesivos y ret¨®ricos, y que la ¨²nica forma de poner de manifiesto su fatuidad y engolamiento es el tratarlos como maniqu¨ªes caricaturescos, incapaces de andar como seres humanos bajo el peso de sus uniformes y gestos cristalizados. Esta es la opini¨®n de Bertolucci, quien en su Novecientos tambi¨¦n incurre en el mismo error, pero yo opino que deshumanizar a estos seres es una equivocaci¨®n monumental, tanta como, por lo menos, como reducir los militantes de izquierda a una etiqueta ¨²nica y simple.. Queremos los coroneles es un cine directamente surgido de la cr¨®nica period¨ªstica de urgencia, que alcanza su m¨¢xima eficacia cuando el p¨²blico participa de un grado m¨ªnimo de complicidad con lo que se le cuenta. Para el p¨²blico italiano, conocedor de intentos similares, esta truculenta historia montada a mayor gloria de Ugo Tognazzi -actor excesivo, que necesita un control del que aqu¨ª carece- puede tener cierta gracia, pero no en nuestro pa¨ªs, a a?os luz de las garant¨ªas democr¨¢ticas que impidan bromas pesadas como la que nos cuenta Monicelli.