Arrecian las cr¨ªticas contra el presidente portugu¨¦s
?Est¨¢ en marcha el primer movimiento importante contra el general Eanes en su doble calidad de presidente de la Rep¨²blica y de jefe de Estado Mayor General de las Fuerzas Armadas?
Tras casi un a?o en que los m¨¢s diversos sectores pol¨ªticos (con excepci¨®n de los comunistas) han hecho del apoyo a Eanes el leitmotiv de sus actuaciones, las cr¨ªticas recientemente levantadas contra el presidente, autorizan a la duda. El nombramiento del teniente coronel Loureiro dos Santos como vicejefe del Estado Mayor conjunto, que hace de este joven oficial (tiene cuarenta a?os), el n¨²mero dos de la jerarqu¨ªa militar portuguesa, sigue suscitando comentarios. La prensa, en especial la moderada y conservadora, informa sobre el descontento de los oficiales superiores, y lanza rumores de dimisiones inminentes de importantes figuras, a pesar de los desmentidos oficiales.
Reaparici¨®n de Pinheiro de Azevedo
Simult¨¢neamente, el almirante Pinheiro de Azevedo, que fue primer ministro, anuncia su paso voluntario a la reserva y su vuelta a la vida pol¨ªtica activa, a la cabeza de un nuevo movimiento, el MSD (Movimiento de la Democracia Social). La conferencia de prensa en que anunci¨® esta doble decisi¨®n pareci¨® un tanto confusa en materia ideol¨®gica y sensacionalista en las afirmaciones. El ex primer ministro del ¨²ltimo Gobierno provisional declar¨® que est¨¢ ?contra el capitalismo, el comunismo y la socialdemocracia?, que ocupar¨¢ un lugar ?entre el PC y el PS?, que rehusa la ?alianza con los partidos marxistas porque son ateos?. A?adi¨® que los capitanes no hicieron el 25 de abril y que no hubo derrota de los comunistas en Portugal, ya que ¨¦stos ?se llevaron sin mucho trabajo Guinea, Angola, Mozambique, Cabo Verde y Santo Tom¨¦cNo debe, sin embargo, olvidarse que Pinheiro de Azevedo, el ?almirante sin miedo?, quien se sent¨® a las elecciones presidenciales y consigui¨® el tercer puesto, despu¨¦s de Eanes y de Otelo, con cerca del 12 % de los votos. V¨ªctima de una grave afecci¨®n card¨ªaca una semana antes del escrutinio, desafi¨® a Eanes a un debate televisivo, prometiendo revelaciones que iban a ?destruir? a sus rivales militares y, rn¨²y especialmente, al actual presidente, al que acusaba de ?no ser un militar de abril?.
Es demasiado pronto para saber si Pinheiro de Azevedo podr¨¢ resucitar pol¨ªticamente despu¨¦s del largo eclipse al que oblig¨® su enfermedad.
Por lo dem¨¢s, su reaparici¨®n coincide con la ?contestaci¨®n? de que es objeto la decisi¨®n del pr¨¦sidente de nombrar al vicejefe del Estado Mayor. O Diabo, dirigido por la agresiva panfletista Vera Lagoa, famosa por su despiadada campa?a contra todos los dirigentes anteriores y posteriores al 25 de abril, calific¨® de ?tremendo error? pol¨ªtico y militar, el nombramiento de Loureiro dos Santos.
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