Los dirigentes del grupo Baader Meinhof, condenados a cadena perpetua
Los tres l¨ªderes supervivientes del movimiento Baader-Meinhof han sido condenados por la secci¨®n segunda del tribunal de Stuttgart a cadena perpetua. El presidente de la sala juzga culpables de cuatro asesinatos consumados y de otros 34 intentos, a los acusados Andreas Baader (33 a?os), Gudrun Ensslin (36) y Jan-Carl Raspe (32). El fiscal ped¨ªa tres cadenas, perpetuas para cada uno, m¨¢s quince a?os por asociaci¨®n il¨ªcita.
Despu¨¦s de dos a?os de sesiones ante el citado tribunal de Stuttgart -el proceso m¨¢s caro de la historia judicial alemana, ha costado veinte millones de marcos al erario p¨²blico-, el caso no ha quedado cerrado ante la opini¨®n p¨²blica. A grandes rasgos, el comportamiento de las partes directamente implicadas en el caso revela que no ha sido un proceso transparente: la petici¨®n del ministerio fiscal se ha considerado desmesurada por los sectores democr¨¢ticos del pa¨ªs, los defensores de oficio suplicaron insistentemente durante los ¨²ltimos d¨ªas que, a la vista de clima de sicos¨ªs antiterrorista fomentado por razones pol¨ªticas desde el Gobierno y la oposici¨®n y, observadas notables irregularidades durante el proceso, deber¨ªa quedar interrumpido este sine die. Los defensores elegidos por los acusados han denunciado crudamente en la v¨ªspera de la p¨²blicaci¨®n las implicaciones pol¨ªticas del caso y el deficiente trato dado. Estos factores llevaron a los defensores de elecci¨®n a ausentarse de las sesiones del tribunal durante m¨¢s de un mes, como muestra de disconformidad con el procedimiento seguido. El juez ha desestimado once intentos de asesinato alegados por el ministerio fiscal. Para la presidencia del tribunal, un factor de peso decisivo ha sido el que los acusados ?hayan intentado imponer el concepto de guerrilla urbana? como elemento importante de una lucha antiimperialista contra la Rep¨²blica Federal como metr¨®poli y contra la fascistizaci¨®n de la democracia parlamentaria?. Estas tesis quedaron expresadas, seg¨²n el juez, en el libro Peque?o manual de la guerrilla urbana, elaborado por los comparecientes.Del grupo dirigente de esta organizaci¨®n han muerto en la c¨¢rcel Ulrike Meinhof y Holger Meins el segundo en huelga de hambre y la primera en extra?as circunstancias a¨²n no aclaradas. En cuanto a los condenados ahora, Bader, fue detenido como consecuencia del atraco de unos grandes almacenes de Francfort y liberado de la c¨¢rcel por sus simpatizantes, en 1970. Poco despu¨¦s anunciaba la creaci¨®n de la ?Fracci¨®n del Ej¨¦rcito Rojo?. Durante un tiempo colabor¨® con las guerrillas palestinas en Jordania y Siria. Gudrun Ensslin es autora de un libro titulado Contra la muerte at¨®mica, todos en contra de la bomba nuclear, publicado en 1964. Decepcionada por la ?gran coalici¨®n? entre socialdem¨®cratas y democristianos, opt¨® por una radicalizaci¨®n pol¨ªtica. Jan Carl Raspe pasa en su grupo por un ?t¨ªpico intelectual?, graduado en sociolog¨ªa y uno de los fundadores de la ?Comuna dos? berlinesa, en 1970.
Las consecuencias del proceso contra los tres ?anarquistas?, como insiste en considerarlos la funci¨®n p¨²blica, no quedar¨¢n en la comunicaci¨®n de las sentencias. Los abogados defensores han insistido en una conferencia de prensa que ?es inadecuado considerar a sus mandantes como criminales comunes? y que, por el contrario, deber¨ªa v¨¦rseles como ?v¨ªctimas de una guerra sicol¨®gica?, al igual que estiman los abogados de otros tres comparecientes ante un tribunal de Stuttgart acusados de actos imilares por motivaci¨®n pol¨ªtica: Schily, Heldmann, Oberwinder Widenhammer, para los que, el fiscal tambi¨¦n pide la pena m¨¢xima, cadena perpetua. Estos han sido acusados, entre otros hechos, por atentados con dinamita contra instalaciones militares americanas en Heidelberg y Francfort.
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