La pol¨¦mica sobre el eurocomunismo domina la actualidad pol¨ªtica francesa

El virulento ataque de los dirigentes de la URSS, a trav¨¦s del semanario Tiempos Nuevos, al Partido Comunista de Espa?a (PCE) y a su secretario general, Santiago Carrillo, como consecuencia del libro de este ¨²ltimo, Eurocomunismo y Estado, continuaba ayer dominando la atenci¨®n en este pa¨ªs. De repente, todo el mundo pregunta por el libro del l¨ªder comunista espa?ol y desea leerlo. La invitaci¨®n al palacio Real, anteayer, ?al mismo hombre que fue encarcelado hace s¨®lo seis meses no deja de intrigar a una opini¨®n acostumbrada a los ?ladridos fratricidas? con los que dialogan Valery Giscard d'Estaing y Jacques Chirac, en la mayor¨ªa que gobierna, y Francois Mitterrand y Georges Marchais, en el campo de la oposici¨®n.Hasta el momento en que estall¨®, hace tres d¨ªas, la ?bomba? sovi¨¦tica contra el dirigente espa?ol, s¨®lo algunos especialistas ten¨ªan noticia del libro Eurocomunismo y Estado. Desde ayer, los medios de comunicaci¨®n social se han encargado de adelantar lo m¨¢s esencial de su contenido, acentuando la denuncia que hace el texto aludido de las ?desviaciones? y las ?degeneraciones ? en el r¨¦gimen de la URSS.

Editorialistas y observadores pol¨ªticos contin¨²an analizando la significaci¨®n profunda de la intervenci¨®n de Mosc¨². La gran mayor¨ªa razona en t¨¦rminos semejantes a los empleados ayer por el director del semanario de tendencia socialista Le Nouvel Observateur: ?Santiago Carrillo ha sido declarado un hereje, literalmente, ha sido excomulgado. En consecuencia, los dem¨¢s jefes comunistas, impl¨ªcitamente, son requeridos para que se manif¨ªesten en favor de la ortodoxia y contra la herej¨ªa. Despu¨¦s de la ruptura con los chinos, es la primera vez que Mosc¨² se manifiesta tan violentamente contra un Partido Comunista. Esto constituye un viraje.?

La ?crisis abierta? por los dirigentes de la URSS, se piensa en esta capital, pudiera comprometer el statu quo de varios pa¨ªses de la Europa comunista del Este. Hasta la fecha, al menos, s¨®lo los partidos comunistas de dos de estos pa¨ªses se han manifestado radicalmente contra el eurocomunismo. Se trata del jefe del partido b¨²lgaro, Todor Zivkov, y del miembro del Presidium del PC checo, Vasil Bilak.

Para el primero, ?el eurocomunismo es una nueva forma de antisovietismo?, y el dirigente de Praga declar¨® recientemente que ?el eurocomunismo es una mezcla de los elementos m¨¢s diversos del reformismo peque?o burgu¨¦s?.

Los otros cuatro partidos comunistas del Este, hasta ahora, se han mantenido al margen de la pol¨¦mica engendrada por el eurocomunismo, pero manifestaciones m¨¢s o menos, oficiosas de los unos y los otros dejan entender que si la URSS les obligase a pronunciarse en favor o en contra, los problemas en el campo, comunista se complicar¨ªan: ?De hecho, todos somos eurocomunistas -dec¨ªa hace pocos d¨ªas un dirigente polaco-, porque los pa¨ªses del Este realizamos nuestro socialismo espec¨ªfico. ?