Los l¨ªderes de los partidos italianos sancionan ma?ana el programa de gobierno
Ma?ana, los secretarios de los seis partidos que dan vida al Gobierno Andreotti (los democristianos con un¨¢nime apoyo y los comunistas, socialistas, socialdem¨®cratas, republicanos y liberales absteni¨¦ndose) sancionar¨¢n definitivamente ¨¦l acuerdo program¨¢tico concertado fatigosamente, tras cuatro meses de negociaciones, el martes pasado. Se trata ahora de ponerse de acuerdo sobre el procedimiento a seguir para que Andreotti lo haga suyo y el Parlamento lo sancione.Hasta ahora, las direcciones de los partidos, sobre todo los protagonistas, democracia cristiana y comunistas, han ratificado el acuerdo. Inciertos todav¨ªa los liberales, quienes de ning¨²n modo quieren firmar un documento con los comunistas, pero que si no lo hacen quedar¨¢n como ?cobertura? para cualquier juego democr¨¢tico hacia la derecha.
La direcci¨®n comunista ha aceptado el acuerdo program¨¢tico con un sentido ?triunfalista?, como un primer paso hacia un Gobierno de unidad democr¨¢tica?, necesario para sacar de la crisis al pa¨ªs. En la direcci¨®n democristiana, sin embargo, ha habido marejada. Y la voz cantante de la oposici¨®n, como en otras ocasiones, la ha llevado Amintore Fanfani; desde oto?o pasado, Fanfani defiende una pol¨ªtica de choque frontal con los comunistas, contrariamente a la pol¨ªtica de confrontaci¨®n de Moro y Zaccagnini.
Fanfani, como custodio de las instituciones republicanas, segunda parens patriae como presidente del Senado, ha puesto mucho cuidado en sus cr¨ªticas de reclamar el respeto de la Constituci¨®n. Ha criticado a Moro, porque la ?pausa de reflexi¨®n? que le daba el Gobierno de las abstenciones no ha sido bien aprovechada, y a Andreotti, porque proponiendo una especie de ?directorio? del Gobierno con los secre tarios de los partidos, camina fuera de la Constituci¨®n. Adem¨¢s, tan largas negociaciones para llegar a un acuerdo program¨¢tico .que, excepto la pol¨ªtica exterior, lo comprende todo, han frenado la acci¨®n del Gobierno y del Parlamento, con da?o para el pa¨ªs y deterioro, de las instituciones.
En palabras simples, Fanfani se hace defensor del Parlamento contra la injerencia de los partidos, contra un mal que ha caracterizado la historia trentenal de la actual Rep¨²blica italiana. La soluci¨®n por parte de Fanfani, si no se logra formar una mayor¨ªa de Gobierno estable y homog¨¦nea, es elecciones anticipadas. Por su parte, los comunistas aceptan la actual situaci¨®n como un primer paso para entrar en el Gobierno, que es su objetivo permanente. Si los dos protagonistas de la pol¨ªtica italiana, comunistas y democristianos, siguen reforz¨¢ndose en detrimento de los partidos menores, intermedios, tarde o temprano llegar¨¢n al choque frontal entre s¨ª o a la par¨¢lisis del sistema.
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