Los funcionarios municipales de Vigo, sin asistencia m¨¦dica

Desde hace unos dos meses el centro m¨¦dico Povisa ha dejado de prestar atenci¨®n a los funcionarios municipales de Vigo, que se encuentran, sobre todo los de menos ingresos, en una dif¨ªcil situaci¨®n. Al parecer, el motivo de esta actitud por parte del centro hospitalario se debe a que la entidad aseguradora que ha concertado con el Ayuntamiento los servicios m¨¦dico-quir¨²rgicos IMQE (Instituto M¨¦dico Quir¨²rgico de Especialidades, SA), de Madrid, debe a Povisa 1.300.000 pesetas por servicios realizados en los ¨²ltimos meses.La situaci¨®n y los problemas directa o indirectamente del policl¨ªnico con el Ayuntamiento de Vigo vienen ya de hace varios a?os, pues desde hace dos el Ayuntamiento debe unos dos millones de pesetas al centro, por servicios prestados en un concierto entre ambos. La cifra era poco antes de unos seis millones, de los que ¨²ltimamente el Ayuntamiento ha librado cuatro.

De todas formas, el tema tendr¨¢ otras implicaciones, porque Covisa ha puesto el asunto en manos de sus abogados, y es posible que requiera judicialmente a IMQE el pago de su deuda. Por otra parte, el Ayuntamiento, ante el problema creado a sus funcionarios, ha decidido denunciar ante el delegado de la entidad aseguradora la situaci¨®n.

Al parecer, la cuesti¨®n se reduce a una falta de entendimiento entre las partes. Por una, IMQE marcaba unos per¨ªodos de tiempo de estancia en el sanatorio de los enfermos asegurados, aunque en la mayor¨ªa de los casos ese tiempo no resultaba suficiente y el internamiento hab¨ªa de prolongarse. Aunque en principio pagaba esas diferencias al centro m¨¦dico, desde hace unos dos meses y medio ha dejado de abonarlas hasta alcanzar la cifra se?alada. Tambi¨¦n pudiera ser que el Ayuntamiento se hubiese retrasado en el pago de las primas, pero un portavoz de esta entidad asegur¨® a EL PAIS que estaban al d¨ªa y que la comisi¨®n correspondiente hab¨ªa aprobado el pago del pasado mes de junio. La prima es de 890.000 pesetas que, al parecer, podr¨ªa resultar insuficiente a IMQE para hacer frente a los pagos al sanatorio.

El caso es que, en definitiva, quienes est¨¢n sufriendo directamente son funcionarios que se cre¨ªan protegidos por un seguro de asistencia m¨¦dica y tienen que recurrir a sus propios m¨¦dicos o al Hospital Municipal en las mismas condiciones que los asistidos por la Beneficencia. Entretanto, en sus n¨®minas se les contin¨²an descontando poco m¨¢s de doscientos pesetas para el seguro privado.

El problema de los funcionarios se extiende tambi¨¦n a la provisi¨®n de medicinas, de las que pagan un 20 %, corriendo el 80 % restante a cargo del Ayuntamiento. Por lo visto ¨¦ste se retrasa excesivamente en los pagos al Colegio de Farmac¨¦uticos y adeuda, a dos farmacia, por lo menos, unos dos millones de pesetas. En cualquier caso, el 20 % de las medicinas consumidas es puntualmente deducido de la n¨®mina de los funcionarios.