En cuarentena la construcci¨®n de centrales nucleares en Alemania

A un mes largo de la reanudaci¨®n de la vida pol¨ªtica en la Rep¨²blica Federal de Alemania, tras la pausa del verano, se da por seguro que la construcci¨®n de centrales nueleares en este pa¨ªs entrar¨¢ en cuarentena. En los pr¨®ximos cuatro o cinco a?os no se construir¨¢ ninguna central nuclear m¨¢s, si es cierto lo que aseguran los m¨¢s inmediatos colaboradores del ministro responsable del sector, el titular de la cartera de Tecnolog¨ªa, Matthoefer.

La opci¨®n se presenta en t¨¦rminos de rompe y rasga: si no se modifica el programa energ¨¦tico del Gobierno, cuya presentaci¨®n oficial tendr¨¢ lugar en el pr¨®ximo oto?o, el partido socialdem¨®crata sufrir¨¢ un grave desgarro interior que se har¨¢ patente en noviembre, con ocasi¨®n de la conferencia que celebrar¨¢ el partido en Hamburgo. En la socialdemocracia ha mellado la resistencia popular al crecimiento incontrolado de centrales nucleares sin garant¨ªas ecol¨®gicas. O se mantiene a todo trance la unidad social dem¨®crata, a¨²n a costa de desairar a los grandes empresarios, o este partido se ver¨¢ a no tardar fuera del Gobierno con su honor muy comprometido ante sus propios electores. Se cuenta de antemano que los liberales, que tambi¨¦n celebrar¨¢n su congreso poco antes que los socialdem¨®cratas, votar¨¢n contra el plan at¨®mico del Gobierno, defendido especialmente por el canciller Helmut Schmidt. A cualquier verdadero socialista no se le escapa el trastueque de papeles que, cada vez con m¨¢s-nitidez, protagonizan lasdos formaciones pol¨ªticas aliadas que ahora encarnan el ejecutivo. Esta situaci¨®n puede llevar a cambios en el Gobierno: ni los liberales est¨¢n de acuerdo con el ministro de Econom¨ªa, Friderichs, mierribro de su partido y partidario del potencial at¨®mico, ni los socialdem¨®cratas respaldan en bloque a Schmidt.La postura de los ?antiat¨®micos? del Gobierno o del Parlamento no esta exenta de riesgos para el ciudadano medio, que, en definitiva, puede temer cualquiera de las dos opciones que se presentan desde el poder en materia de plan nuclear. Como medio de garantizar a las grandes industrias la energ¨ªa que precisan, el propio ministro Matthoeo.fer ha anticipado que habr¨¢ un plan de austeridad m¨¢s bien r¨ªgido. Se trata de economizar un quinto de la energ¨ªa que se consume y para ello se impondr¨¢n algunas medidas, entre ellas el encarecimiento de los receptores de televisi¨®n en color, la imposibilidad de utilizar la ducha o el horno de las cocinas en las horas de m¨¢s consumo industrial ,la subida de precios a los consumidores de gasolina, que son el 80 % de los alemanes.Se pretenda o no, lo que parece es que el Gobierno, mediante dos opciones, busca lo mismo: doblegar al ciudadano medio para que termine aceptando la prol¨ªferaci¨®n de centrales nucleares, en su pa¨ªs. El mismo ministro que ahora anticipa l¨ªneas de austeridad se mostr¨® decepcionado cuando eljuez Konrad Gelzer, de, Muenter, dict¨® sentencia contra la central de plutonio de Kalkar, en la que el Ministerio de Tecnolog¨ªa habr¨ªa de satisfacer el 90 % de los gastos de construcci¨®n. La raz¨®n cient¨ªfica que pes¨® en el animo del juez era que esta central podr¨ªa convertirse en una verdadera superbomba debido a que la sustancia a emplear como refrigeradora -natrium l¨ªquido estalla al entrar en contacto con el agua.