Reanudaci¨®n de las negociaciones Espa?a-EFTA a finales de este mes

Han concluido los estudios t¨¦cnicos que desde hace tres d¨ªas realizan en Ginebra los nueve miembros de la delegaci¨®n gubernamental espa?ola, con los representantes de los siete pa¨ªses integrantes de la Asociaci¨®n Europea de Libre Comercio (EFTA), destinados a preparar una agenda de negociaciones que permita establecer un acuerdo comercial multilateral entre Espa?a y la EFTA.

A fines de junio se llev¨® a efecto una primera rueda de negociaciones, de la que no surgieron resultados concretos, salvo la fijaci¨®n de la fecha, 28 de septiembre, para lo que un portavoz de la Asociaci¨®n de Libre Comercio ha calificado de segundo round. El t¨¦rmino empleado por el funcionario da una idea de lo dificultoso de estas negociaciones, cuyos aspectos- t¨¦cnicos comenzaron a ser abordados a principios de la presente semana en cuatro diferentes grupos de trabajo, uno de los cuales est¨¢ encargado de confeccionar la lista de los productos que en el futuro podr¨ªan entrar en el marco del libre comercio, es decir, quedar exentos de aranceles aduaneros. Otra comisi¨®n de trabajo ha estado dedicada exclusivamente a estudiar las posibilidades de que Portugal, pa¨ªs miembro de la EFTA, pueda concurrir a un futuro acuerdo con Espa?a, en las mismas condiciones que los otros pa¨ªses integrantes (Austria, Finlandia, Islandia, Noruega, Suecia y Suizai).El objetivo inmediato de la segunda etapa de negociaciones, que se llevar¨¢n a efecto a fines de septiembre, consiste en liberalizar el intercambio comercial entre Espa?a y los pa¨ªses de la EFTA, al mismo nivel que existe actualmente entre Espa?a y Comunidad Econ¨®mica Europea, entendi¨¦ndose como objetive, final llegar en un futuro con Espa?a, a la supresi¨®n de las tarifas aduaneras para los productos industriales, tal cual opera desde hace tres meses entre los diecis¨¦is pa¨ªses miembros de la CEE y la EFTA que, en su conjunto, durante 1976 abarcaron el 39,1 % del comercio mundial.

Espa?a se comprometi¨® en principio a otorgar a Portugal el mismo trato de excepci¨®n que dan a ese pa¨ªs el resto de los de la EFTA, ?en virtud de su menor grado de desarrollo econ¨®mico?.

Aunque no hubo declaraciones oficiales al t¨¦rmino de las conversaciones, pudo apreciarse que, hubo acuerdo en ciertos puntos b¨¢sicos. La EFTA

-sostuvo uno de los expertos espa?oles- ?es flexible, pragm¨¢tica y creemos que al igual que nosotros est¨¢ deseosa de llegar a un acuerdo para la rebaja de aranceles de los productos industriales?. Dicho acuerdo ser¨ªa igual en sus comienzos al firmado entre Espa?a y los pa¨ªses de la Comunidad Econ¨®mica Europea, en 1970.