El Polisario intensifica su actividad diplom¨¢tica, cara a la "cumbre" sobre el Sahara
El Frente Polisario est¨¢ desarrollando una intensa labor diplom¨¢tica para sus citar el inter¨¦s de los jefes de Estado africanos en la ?cumbre? extraordinaria sobre el Sahara, despu¨¦s que esta fue aplazada de nuevo a causa de la tensi¨®n existente entre Rodesia y Zambia.
Los dirigentes saharauis se interrogan sobre el fondo de las declaraciones hechas por el presidente libio, El Gadaffi, quien preconiz¨® la integraci¨®n del Sahara en el seno de una confederaci¨®n que abarcar¨ªa a todo el Magreb y afirm¨® estar dispuesto a defender esa tesis ante Argel, Rabat, Nuakchott y T¨²nez.La llegada a Tr¨ªpoli del secretario general del Polisario, Ahmed Abdelaziz, parece estar directamente relacionada con lo dicho por el coronel libio, aunque esta interpretaci¨®n es rechazada por el Frente en la capital argelina.
La prensa de Argel no se ha hecho eco de las palabras de El Gadaffi y contin¨²a afirmando que la causa saharaui se abrir¨¢ paso a pesar de las maniobras marroqu¨ªes en torno a la ?cumbre? y el manifiesto recelo que mantienen un n¨²mero notable de estadistas africanos.
En el curso de una declaraci¨®n a los medios informativos de este pa¨ªs, el presidente de Mal¨ª, Mussa Traore, se pronunci¨® en favor de la intangibilidad de las fronteras heredadas de la ¨¦poca colonial y dijo que esta noci¨®n debe aplicarse al problema saharaui, tal y como es admitido por la carta de la OUA.
La ?incoherencia? espa?ola es destacada por los observadores pol¨ªticos a prop¨®sito del discurso pronunciado en la Asamblea General de la ONU, por el ministro espa?ol de Asuntos Exteriores, aunque se admite que persista la voluntad oficial espa?ola por favorecer un arreglo aceptable para todas las partes implicadas en el problema.
En ese sentido debe ser interpretada la rigidez proverbial de que siguen dando prueba los argelinos. El ¨®rgano del Frente de Liberaci¨®n Nacional ?Revoluci¨®n africana? estima que la presi¨®n de Rabat sobre Madrid s¨®lo ha conseguido, parcialmente, sus objetivos, mientras que la mayor¨ªa del pueblo espa?ol sigue sin ?digerir? el abandono de la antigua colonia en condiciones que ensombrece la imagen de la Espa?a post- franquista.
Las virtudes de la negociaci¨®n deben acompa?arse del gesto rudo de las armas. Paralelamente a las negociaciones se evocan aqu¨ª las haza?as militares del Polisario y se encomian detalles como el ba?o .reciente de una unidad de guerrilleros en las aguas del Atl¨¢ntico, en Liteima, a pocos kil¨®metros de El Aiuq, donde, seg¨²n los saharauis, ?hubiera querido tomar el t¨¦ Hassan ll?.
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