Derroche navide?o

Vivo en un barrio perif¨¦rico y hoy he tenido que ir al centro, y al llegar a Cuatro Caminos he visto todos los preparativos de luces para iluminar Madrid para las pr¨®ximas fiestas. Yo cre¨ªa que este a?o iba a cundir el sentido com¨²n despu¨¦s de todas las medidas de austeridad que est¨¢ proclamando el Gobierno, pero no seguimos con la misma inconsciencia que durante estos cuarenta ¨²ltimos a?os y yo estoy tan indignada que si fuera m¨¢s joven saldr¨ªa a la calle y romper¨ªa todos esos adornos, porque son una provocaci¨®n para todas esas gentes que por no haber dinero en el pa¨ªs est¨¢n parados y otros, como mi marido, que la empresa ha tenido que reducir personal. Me gustar¨ªa decirle al cardenal se?or don Enrique y Taranc¨®n que en vez de preocuparse tanto por que la Iglesia no ha sido tenida en cuenta en la Constituci¨®n se preocupara de decirle a todos ?esos cristianos? (que lo ¨²nico que est¨¢n haciendo es desacreditar cada vez m¨¢s a la Iglesia) que se parasen a pensar en ese hombre a quien quieren festejar. Si El pudiera decirles algo, cuando viera los millones que est¨¢n tirando habiendo tanta necesidad. El, que, seg¨²n dicen ellos mismos, no quer¨ªa m¨¢s que justicia y reparto de todos los bienes, al pobre hombre probablemente se le caer¨ªa la cara de verg¨¹enza al comprobar c¨®mo est¨¢n utilizando sus ense?anzas.