"La gran empresa no puede ser la c¨²pula que envuelva a la peque?a y mediana"
EL PAIS: ?Qu¨¦ principios defiende la COPYME?MIRET MAGDALENA: La COPYME se fund¨® a final del a?o 1977. Y sus principios pretenden el desarrollo y modernizaci¨®n de la peque?a y mediana empresa, as¨ª como su presencia en los intereses profesionales y econ¨®mico-sociales de las mismas en el pa¨ªs.
En el mundo actual, las grandes empresas se encuentran ante problemas de comunicaci¨®n y de organizaci¨®n humana, de servicio comercial y de administraci¨®n material, que se han agravado considerablemente por el excesivo tama?o de las empresas. Italia, por ejemplo, es un pa¨ªs con una econom¨ªa de ?gigantes enfermos?, como suele llamarse a las grandes empresas multinacionales, como FIAT, Pirelli, etc¨¦tera... En Espa?a empezamos a damos cuenta de que las grandes empresas no son tan rentables como se supon¨ªa: se empiezan a encontrar con graves cuestiones humanas, financieras y comerciales que, a nivel de gran grupo, no s¨¦ pueden resolver por su excesiva dimensi¨®n, falta de contacto personal y complicaci¨®n burocr¨¢tica.
El proceso espa?ol es significativo: de 1958 a 1974 aument¨® tres veces el n¨²mero de las peque?as y medianas, y s¨®lo incrementaron vez y media las grandes; actualmente hay un mill¨®n de empresas de peque?a o mediana dimensi¨®n, y s¨®lo novecientas de m¨¢s de quinientos obreros. Por otro lado, estas ¨²ltimas (tan poderosas pol¨ªtica y econ¨®micamente) s¨®lo dan trabajo al 14 % de la poblaci¨®n activa del pa¨ªs, y aqu¨¦llas (las peque?as y medianas), al 86 %. Adem¨¢s, estas ¨²ltimas, consideradas como las cenicientas injustamente) contribuyen a la riqueza del pa¨ªs en el 75 % de los bienes y servicios producidos. Pero ning¨²n dato tan revelador de la falacia de las opiniones corrientes sobre la importancia econ¨®mica y social de la gran empresa en Espa?a es qu¨¦, en el proceso de los diecis¨¦is a?os antes citados, absorbe cada vez menos mano de obra, porque su participaci¨®n en el conjunto del empleo ha disminuido en el 33%.
EL PAIS: ?Qu¨¦ tipo de empresarios y sectores est¨¢n representados mayoritariamente en esta patronal?
M. M. Nosotros consideramos, peque?a y mediana empresa a la que tiene menos de 250 trabajadores (otros pa¨ªses ponen otro tope mayor) y no posee vinculaci¨®n directa con ning¨²n grupo monopol¨ªstico, ni multinacional, ni financiero, ni estatal o paraestatal. De ah¨ª que engrosen sus filas empresas de casi todas las zonas m¨¢s desarrolladas de Espa?a, tanto grupos sectoriales homog¨¦neos, como federaciones heterog¨¦neas, y estamos actuando en aquellas otras que empiezan a adquirir conciencia de la necesidad de mutua ayuda.
EL PAIS: ?Considera necesaria una patronal de la peque?a y mediana empresa distinta de la gran empresa o, simplemente, la existencia de una patronal? Razones.
M. M. Por supuesto que s¨ª. Los problemas humanos, sociales y organizativos de la gran empresa son muy diferentes de los de la peque?a y mediana empresa. Adem¨¢s, aqu¨¦lla no es infrecuente que obedezca a grupos de presi¨®n o peque?os n¨²cleos de intereses poderosos; y, en cambio, las nuestras son independientes y quieren seguir si¨¦ndolo para r¨ªo verse mediatizadas por intereses ocultos, que piensan preferentemente en su propia ventaja y no tanto en el pa¨ªs ni en la regi¨®n donde est¨¢n. Una sola patronal que englobe cosas tan diferentes no traer¨ªa como consecuencia, como vemos ahora en muchas asociaciones sectoriales, sino el dominio de la grande sobre la peque?a.
EL PAIS: ?Qu¨¦ opina de la CEPYME?
M. M. Es una confederaci¨®n paralela a la COPYME, que quiere: defender los intereses de la peque?a y mediana empresa, pero se distingue de la nuestra, en mi opini¨®n, en lo siguiente: a) Nosotros defendemos la libertad econ¨®mica, pero dentro de una econom¨ªa social de mercado, por la cual entendemos una estructura econ¨®mico-social que a¨²ne la libertad con el sentido social; b) No creemos que un dirigente de nuestra confederaci¨®n deba aceptar (como pasa en la CEPYME), un alto cargo en la organizaci¨®n patronal de la gran empresa (la CEOE), pues sin quererlo le puede llevar a una mediatizaci¨®n en la defensa de los intereses espec¨ªficos de la peque?a y mediana empresa. c) Los problemas de la peque?a y mediana empresa no pueden ser dirigidos por una coordinaci¨®n hecha por la gran empresa, que supondr¨ªa, en la pr¨¢ctica, una estructura piramidal en la que el v¨¦rtice es la gran empresa. ?Por qu¨¦? Pensamos que, sin oponernos a ¨¦sta, debemos independizamos lo m¨¢s posible de la tutela que hasta ahora ha ejercido sobre la peque?a y mediana.
EL PAIS: ?Considera necesarias dos patronales de la PYME?
M. M. Si no hay m¨¢s remedio aceptamos la existencia de dos patronales de la peque?a y mediana empresa. Pero estamos en conversaciones amistosas para intentar superar tal divergencia de organizaciones, o bien en la estructura misma o, al menos, en la actuaci¨®n pr¨¢ctica. Pero el tiempo dir¨¢ si esto es posible.
EL PAIS: ?Es necesaria la identif¨ªcaci¨®n pol¨ªtica de una patronal?
M. M. No. No s¨®lo no es necesaria, sino que resulta un gran inconveniente. Nosotros somos totalmente independientes de la gran patronal y de cualquier grupo o partido pol¨ªtico. No debemos mezclar nuestros intereses profesionales con la pol¨ªtica de partido; hemos aceptado entre nuestros socios un total pluralismo pol¨ªtico.
EL PAIS: ?Qu¨¦ problemas tiene en la actualidad la PYME? ?Qu¨¦ soluciones ofrece la COPYME?
M. M. Problemas, muchos. Me limitar¨¦ a enumerar algunos: a) la necesidad de un contrato de descuento con las entidades de cr¨¦dito (bancos, cajas de ahorro, financieras) para evitar las inseguridades actuales en la consecuci¨®n y continuaci¨®n de los cr¨¦ditos, y del descuento de letras; superando, adem¨¢s, los abusos que existen en cuanto al coste crediticio actual; b) creaci¨®n de bancos de peque?a y mediana empresa en algunos casos, cuyos accionistas sean exclusivamente ellos mismos y no otras entidades de cr¨¦dito; c) estructuraci¨®n de sociedades de garant¨ªas mutuas entre las empresas asociadas, para tener un aval en operaciones comerciales que hoy dif¨ªcilmente pueden ser realizadas por las peque?as y medianas empresas; d) sociedades de exportaci¨®n que agrupen a pequeftas empresas y den cauce y salida de sus productos hacia el extranjero; e) diferentes promociones de instituciones (como un Instituto de la Peque?a y Mediana Empresa) que faciliten el desarrollo, reorganizaci¨®n y modernizaci¨®n de la peque?a y mediana empresa, no s¨®lo industrial, sino comercial tambi¨¦n; pero siempre que no suponga esto una mayor burocratizaci¨®n estatal, sino que se realice por medio de organizaciones aut¨®nomas respecto a la Administraci¨®n p¨²blica, que sean dependientes de los propios empresarios y asociaciones empresariales. El Estado debe ayudar econ¨®micamente, pero no dirigir exclusivamente estas instituciones aut¨®nomas; f) una distribuci¨®n m¨¢s equitativa del cr¨¦dito, pues a tenor de su participaci¨®n en bienes y servicios del pa¨ªs, deb¨ªa ir a ellas las tres cuartas partes del mismo, y ahora se le da mucho menos.
EL PAIS: ?Qu¨¦ filiaci¨®n pol¨ªtica es mayoritaria en la COPYME?
M. M. Ya he dicho que nuestra preferente filiaci¨®n es la independencia, sin olvidar que muchos pertenecen a diversos y muy diferentes partidos pol¨ªticos, desde la derecha a la izquierda, pasando por el centro.
EL PAIS: ?Qu¨¦ n¨²mero de afiliados tiene la COPYME?
M. M. Dificil de evaluar, porque todo est¨¢ en desarrollo organizativo, pero podemos decir que tenemos 100.000 empresas afiliadas en Espa?a. Dar cifras claramente exageradas es caer en un triunfalismo que no existe en ning¨²n pa¨ªs europeo con m¨¢s experiencia y conciencia empresarial que nosotros. La verdad es que la afiliaci¨®n europea, y tambi¨¦n la de Espa?a, es minoritaria, pues no hay suficiente conciencia colectiva de ayuda mutua entre la mayor¨ªa de los empresarios.
EL PAIS: ?Cu¨¢ntos de ellos est¨¢n en la CEOE?
M. M. En principio, ninguno pertenece a la CEOE.
EL PAIS: ?Cu¨¢l es el porvenir de la peque?a y mediana empresa?
M. M. Creemos que pasar¨¢ como en Europa: un proceso cada vez m¨¢s positivo hacia la presencia econ¨®mica en primera l¨ªnea de la peque?a y mediana empresa. Sus ventajas actuales sobre la grande son: a) una dimensi¨®n m¨¢s humana, que permite superar mejor los conflictos sociales, y donde existe una comunicaci¨®n m¨¢s flexible entre mandos y ejecutores, resistiendo mejor los embates de las crisis econ¨®micas; b) se comprueba actualmente que, por encima de una cierta producci¨®n, los costes no s¨®lo no disminuyen como se cre¨ªa, sino que aumentan; por eso a la empresa hay que darle su dimensi¨®n adecuada, pero no hacerla cada vez m¨¢s grande; el gigantismo empieza a ser sobrepasado a todos los niveles de la sociedad futura; c) la burocratizaci¨®n invade a la gran empresa y le resta efectividad; d) la decisi¨®n del mando y coordinaci¨®n se hace excesivamente complicada cuando hay grandes multitudes o existen complicados canales de acci¨®n; d) en los veinticinco ¨²ltimos a?os, en Francia, las medianas empresas han duplicado su producci¨®n, y est¨¢n accediendo, con gran ¨¦xito, a la competencia mundial; e) la continuidad de metas y prop¨®sitos est¨¢ mejor garantizada por las generaciones familiares que las suelen dirigir, que por los cambiantes cargos directivos de la gran empresa; f) la creatividad se desarrolla actualmente mejor en el extranjero a trav¨¦s de la peque?a y mediana que no por la grande; g) se ensayan con m¨¢s facilidad m¨¦todos m¨¢s progresivos de participaci¨®n social o gerencial que en la grande, la cual resulta demasiado conservadora, rutinaria y autoritaria; h) la gran empresa se encuentra m¨¢s vinculada a la pol¨ªtica y, en general, a una orientaci¨®n demasiado conservadora de la misma, cost¨¢ndole m¨¢s trabajo acepta! el pluralismo pol¨ªtico.
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