Sobre la cl¨ªnica Los Nardos
En nombre propio y como representante legal de Esfera M¨¦dica, SA, poseedora de un peque?o paquete de acciones de Los Nardos, hice todo lo posible por evitar el cierre de la cl¨ªnica, y aunque no pertenezco desde hace m¨¢s de un a?o a su consejo de administraci¨®n, cuando ¨¦ste consider¨® como ¨²nica soluci¨®n la venta del sanatorio, yo colabor¨¦ en esas gestiones como pueden atestiguar los doctores Palacios Carvajal y Mestre Rosi, del Ministerio de Sanidad, y el se?or Pesta?a, por el otro ofertante. No hubo jam¨¢s proyectos de compra por parte de Esfera M¨¦dica, ni los habr¨¢. Lo que antecede es la ¨²nica verdad, f¨¢cilmente demostrable, lo dem¨¢s es mala intenci¨®n.Respecto a la referencia que se hace a mi persona, he de aclarar que poseo 200.000 pesetas en acciones de Esfera M¨¦dica (el 98% de sus accionistas son m¨¦dicos y practicantes de su cuadro facultativo), llevo veintitr¨¦s a?os ejerciendo la especialidad de tocoginecolog¨ªa en dicha entidad y dirigi¨¦ndola desde 1956, en que fui elegido presidente de su consejo y reelegido cada cuatro a?os. Es evidente que mi vinculaci¨®n es m¨¢s profesional que econ¨®mica.
He de hacer una ¨²ltima aclaraci¨®n: en la junta general extraordinaria de Los Nardos, a que ustedes hacen referencia en su informe, qued¨® plenamente demostrado que el planteamiento de las tarifas especiales era err¨®neo. Al final del a?o 1976, la Administraci¨®n de la cl¨ªnica, a la saz¨®n en manos de un experto muy calificado, unific¨® y elev¨® las tarifas de las sociedades al tiempo que conced¨ªa una bonificaci¨®n si se alcanzaba cierto volumen de facturaci¨®n; se pretend¨ªa que las entidades-clientes utilizaran todos los servicios del centro para conseguir hacerlo rentable. Como Esfera M¨¦dica concentr¨® en la cl¨ªnica sus prestaciones quir¨²rgicas, obst¨¦tricas, radiol¨®gicas, anal¨ªticas, UVI, ri?¨®n artificial, etc¨¦tera, super¨® el dintel condicionante y se benefici¨® de ese descuento que le fue ofrecido en iguales circunstancias que a las dem¨¢s entidades que frecuentaban la cl¨ªnica. Aun as¨ª, las tarifas resultaban similares a las que reg¨ªan en el resto de las cl¨ªnicas de Madrid. Utilizar de nuevo un planteamiento que p¨²blicamente se demostr¨® que estaba equivocado me parece, como m¨ªnimo, poco serio.
Ginec¨®logo.
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