Ecologistas, partidos y centrales, contra la degradaci¨®n de la Casa de Campo y El Pardo

El subsecretario de Ordenaci¨®n Territorial y Medio Ambiente de? Ministerio de Obras P¨²blicas y Urbanismo, Eduardo Merig¨®, acept¨® la propuesta de Aepden de elaborar un estudio sobre las consecuencias que para el monte de El Pardo pueda tener la urbanizaci¨®n de una finca de 460 hect¨¢reas colindantes con este importante ecosistema. Los ecologistas hab¨ªan planteado previamente al se?or Merig¨® sus temores de que el monte sufra un proceso irreversible de degradaci¨®n. Actualmente, son ya tres los grandes proyectos de urbanizaci¨®n que cercan el monte, el pol¨ªgono Valverde, Tres Cantos y este ¨²ltimo de Los Garzos, promovido por el Instituto Nacional de Urbanizaci¨®n.Eduardo Merig¨® visit¨® la finca, acompa?ado por personal t¨¦cnico de COPLACO y del Inur, adem¨¢s de ecologistas y un equipo de bi¨®logos. El estudio ser¨¢ encargado a Fernando Gonz¨¢lez, catedr¨¢tico de ecolog¨ªa en la Universidad Aut¨®noma.

La nota enviada a la prensa por el Ministerio de Obras P¨²blicas y Urbanismo menciona que el proyecto ya ha sido aprobado en Consejo de Ministros. Lo curioso en este caso es que un sector del Ministerio, el Departamento de Medio Ambiente, pueda oponerse (en caso de que el estudio llegue a la conclusi¨®n de que el monte se ver¨¢ afectado) a un proyecto aprobado por otro Departamento del Ministerio, como es COPLACO. Algunos ecologistas consultados piensan que ser¨ªa m¨¢s conveniente que los estudios de este tipo se realizar¨¢n antes de la aprobaci¨®n de los proyectos, y no ?a posteriori?, cuando es mucho m¨¢s dif¨ªcil atajar la actuaci¨®n.

La Casa de Campo, administrada a dedo

Los partidos pol¨ªticos y centrales sindicales integrados en la coordinadora para la defensa de la Casa de Campo han hecho p¨²blica su exigencia de que el destino de la Casa de Campo se gestione a trav¨¦s de una amplia participaci¨®n popular. Concretamente, el comunicado habla de presionar a la Administraci¨®n municipal ?para que no mueva un dedo sin preguntar, y que el primer dedo que mueva sea para eliminar todas las causas de degradaci¨®n f¨ªsica (referidas al tr¨¢nsito de coches en su interior) y sociales (las concesiones privadas de terrenos p¨²blicos) de la Casa Campo.

El comunicado expone la desaparici¨®n de los animales en las zonas m¨¢s frecuentadas por personas y coches, y la invasi¨®n de estos ¨²ltimos en praderas y zonas verdes. Se menciona tambi¨¦n la poca atenci¨®n municipal hacia el arbolado, lo que permite la proliferaci¨®n de procesionarias del pino, que est¨¢n da?ando gravemente los ejemplares.