Las enmiendas de Sancho Rof
?El se?or Sancho Rof, de la Uni¨®n de Centro Democr¨¢tico y casualmente subsecretario del Interior, present¨® una enmienda in voce al art¨ªculo diecis¨¦is de la C¨®nstituci¨®n, al p¨¢rrafo segundo, para ser concretos, mediante la cual las 72 horas como m¨¢ximo de la detenci¨®n preventiva. podr¨ªan prolongarse si una ley determinase otra cosa. ?Qu¨¦ ley? Pues una que ya estaba preparada, aunque entonces no se sab¨ªa. El se?or Rof, quiz¨¢ por sus costumbres adquiridas duirante su embriagadora etapa en la Televisi¨®n aludi¨® tambi¨¦n a la necesidad de modificar los art¨ªculos que se refieren a la inviolabilidad del domicilio.Hay que profundizar en la psicolog¨ªa de los subsecretarios del Interior. No existe nada que saque tanto de quicio a los subsecretarios del Interior como un sospechoso. Los subsecretarios del Interior descansan igualmente ante un inocente que ante un culpable. Pr¨¢cticamente les da lo mismo, porque se trata de los valores n¨ªtidos, fijos, y uno y otro les caen simp¨¢ticos a los subsecretarios.
El se?or Sancho Rof dijo que de prosperar su enmienda, quedar¨ªa garantizada la seguridad p¨²blica y los derechos y libertades que se reconocen en la Constituci¨®n. La dificultad de la democracia estriba en que en ella caben menos instrumentos de defensa que en una dictadura, y nunca los mismos, porque los instrumentos no gozan, digamos, de una pureza t¨¦cnica. En ellos va predeterminada, ¨ªnsita, una cualidad ideol¨®gica y pol¨ªtica. Pero a¨²n hay m¨¢s, y ese m¨¢s es, aunque resulte escandaloso, que la democracia se define precisamente por su indefensi¨®n. Una dictadura contar¨¢ siempre con mas instrumentos para defenderse de manera r¨¢pida y fulminante no va de sus enemigos pol¨ªticos, sino, tambi¨¦n de la insidia, de la mentira, de la deslealtad, de la agresi¨®n a los ?nocentes. Eso es lo que estamos viendo. La sociedad, ahora, est¨¢ m¨¢s indefensa que durante el franquismo.?
21 mayo
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