Cristianos contra cristianos en L¨ªbano
De crisis en crisis y despu¨¦s de tres a?os de guerra civil, el entierro ayer del hijo delex presidente liban¨¦s Soleim¨¢n Franjieh, puede abrir para los libaneses una de las etapas m¨¢s peligrosas desde que comenzara la guerra en 1973.
Los cristianos del partido falangista de Pierre Gemayel, a quienes se atribuye el asesinato de Tony Franjieh y otros miembros de su familia, de acuerdo con los patrones de comportamiento pol¨ªtico del pa¨ªs, deben esperar una violenta reacci¨®n de los grupos y feudos afines a la familia Franjieh.El precio de esas nuevas y probablemente inevitables hostilidades, puede ser nada menos que el L¨ªbano mismo: como pa¨ªs, como naci¨®n y como experiencia de sociedad multiconfesional. Durante tres a?os la derecha sumariamente asimilada a los cristianos, se ha enfrentado a la izquierda simbolizada por los musulmanes y los palestinos. Como resultado de esa confrontaci¨®n, el pa¨ªs qued¨® profundamente dividido.
Recientemente, las grandes familias musulmanas, temerosas de quedar en un Estado progresista y propalestino, comenzaron a reanudar el di¨¢logo con algunos grupos cristianos. Entre estos, la familia Franjieh, una de las casas feudales de mayor raigambre en la zona m¨¢s violenta del pa¨ªs, Ehden.
Los cristianos cercanos al Partido Falange, el m¨¢s importante e influyente entre la comunidad cristiana en su conjunto, se mostraba por el contrario partidario de una especie de cant¨®n cristiano, protegido por Europa e Israel e independiente del otro sector musulm¨¢n. El di¨¢logo reanudado por la familia Franjieh con Rashid Karame, otro l¨ªder musulm¨¢n feudal de la ciudad de Tr¨ªpoli , vecina a Zghorta, ciudad natal de los Franjieh, fue considerado por la Falange como una traici¨®n a la comunidad cristiana. El asesinato de Tony Franjieh sienta un precedente tr¨¢gico, pues hasta ahora, en virtud de una especie de c¨®digo t¨¢cito, los bienes y los familiares de las grandes familias hab¨ªan sido preservados.
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