Ni periodistas ni familiares en los procesos contra los disidentes sovi¨¦ticos
La Uni¨®n Sovi¨¦tica parece dispuesta a terminar cuanto antes con el tema de los disidentes, y ayer inici¨® juicios simult¨¢neos contra cuatro personas acusadas, por distintos tribunales de la URSS, de ?traici¨®n a la patria, espionaje y propaganda antisovi¨¦tica?. Dos de los acusados, Anatoly Shcharanski y A.N.Filatov, pueden ser condenados a muerte, seg¨²n el apartado (a) del art¨ªculo 64 del c¨®digo penal de la federaci¨®n rusa. Por vez primera, portavoces de los tribunales sovi¨¦ticos han convocado ruedas de prensa para informar del desarrollo de los juicios. Ning¨²n periodista occidental tuvo acceso a las salas donde se celebraban las vistas.
La agencia Tass ha publicado, contra su costumbre, amplia informaci¨®n sobre los juicios y los acusados. Se interpreta entre los observadores extranjeros como nueva t¨¢ctica de la propaganda sovi¨¦tica para ser utilizada en el futuro para acusar a los periodistas occidentales ?por no utilizar la informaci¨®n oficial?, seg¨²n se ha visto en las recientes acusaciones hechas contra los periodistas norteamericanos por transmitir noticias procedentes de fuente no oficial.
Dos de los procesados, Anatoly Shcharanski y Alexander Guinsburg, han sido los primeros en rechazar la imputaci¨®n de culpabilidad, tanto en Mosc¨², donde se celebra el proceso contra Shcharanski, como en Kaluga, ante cuyo tribunal ha comparecido Guinsburg.
Barreras met¨¢licas y fuertes contingentes de la milicia imped¨ªan el paso a los periodistas, miembros de las familias y amigos que deseaban presenciar los juicios. Ida Milgrom, de 74 a?os, se le prohibi¨® la entrada a la sala para ver a su hijo Anatoly Shcharanski, y posteriormente se le anunci¨® que estaba llamada a declarar como testigo.
Ninguna notificaci¨®n oficial hab¨ªa tenido para comunicarle el d¨ªa del comienzo de la vista. El hermano mayor de Shcharanski, Leonid, consigui¨® permiso para entrar a la sala dos horas despu¨¦s de comenzado el juicio y posteriormente inform¨® a los periodistas que su hermano ?manten¨ªa el buen ¨¢nimo y la actitud firme?.
Alexander Guinsburg, de 41 a?os, escritor y administrador del ?fondo Solzhenitsym? para ayuda de los presos pol¨ªticos y sus familias, fue detenido en febrero del a?o pasado y puede ser condenado a diez a?os de campo de trabajos y a otros cinco de destierro por ?calumniar la sistema pol¨ªtico y econ¨®mico de la URSS y socavar y debilitar el poder sovi¨¦tico?. Fue condenado dos veces con anterioridad y pas¨® siete a?os en campos de concentraci¨®n.
La agencia oficial sovi¨¦tica Tass ha resumido el acta de acusaci¨®n y se?ala que Guinsburg ?con dinero que recib¨ªa del extranjero, financi¨® actividades hostiles de delincuentes comunes entre los que figuraban asesinos profesionales que intervinieron en fusilamientos de ciudadanos sovi¨¦ticos durante la segunda guerra mundial?. La esposa de Guinsburg, Elena, y el Premio Nobel de la Paz, Andrei Sajarov, se trasladaron a Kaluga para asistir al proceso, pero no pudieron entrar en el edificio del juzgado.
Por ¨²ltimo, en Vilmus, capital de Lituania sovi¨¦tica, se indica que ha comenzado el proceso contra V¨ªctor Patkus, miembro del ?grupo local de Helsinki?, condenado anteriormente y que puede volver a ser castigado con diez a?os m¨¢s de campos de trabajo por agitaci¨®n ?antisovi¨¦tica?.
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