El PC italiano examina su apoyo al Gobierno Andreotti
Enrico Berlinguer, secretario general del Partido Comunista italiano, abri¨® ayer tarde los trabajos del Comit¨¦ Central de su partido. Pr¨¢cticamente es la primera vez que los m¨¢ximos dirigentes comunistas se re¨²nen en asamblea despu¨¦s de la ¨²ltima crisis, que se concluy¨® con el Gobierno Andreotti. Se hab¨ªan reunido durante el secuestro de Moro, pero se interrumpi¨® la asamblea bruscamente, cuando lleg¨® la falsa noticia del hallazgo del cuerpo de Moro en el de Duchessa.Esta reuni¨®n se considera muy importante porque tendr¨¢ que analizar un a?o m¨¢s bien dif¨ªcil para el Partido Comunista. Por eso, como en las ocasiones solemnes, el comit¨¦ lo abre Berlinguer con un discurso.
De las indiscreciones de pasillos recogidas a la hora de despachar esta cr¨®nica, se ha podido saber que son tres los temas m¨¢s importantes en este debate comunista. Por una parte, la actitud del PC italiano en estos meses de Gobierno Andreotti, al cual, por vez primera, los comunistas dan un apoyo externo. La base hab¨ªa reprochado a los dirigentes el haber sido poco cr¨ªticos con el Gobierno monocolor democristiano. Por eso se espera que Berlinguer, sin poner en crisis a Andreotti, pedir¨¢ con mucha firmeza al Gobierno que act¨²e sin nuevos aplazamientos en el importante programa de reformas acordadas por los cinco partidos que lo apoyan.
Otro terna muy delicado es la tensi¨®n que existe entre comunistas y socialistas. Berlinguer insistir¨¢ en que es necesario estrechar los lazos de amistad con los compa?eros socialistas, pero sabe muy bien que el l¨ªder socialista Craxi est¨¢ dispuesto a seguir su camino de ?autonom¨ªa?. Precisamente ayer, Biasini, del Partido Republicano, critic¨® duramente a Craxi porque ?se est¨¢ haciendo amigo tanto de los liberales como de la nueva izquierda del "manif¨ªesto"?
La desuni¨®n de la izquierda
Berlinguer sabe muy bien que tiene hoy en Craxi el mayor enemigo de su estrategia pol¨ªtica de ?compromiso hist¨®rico?, pero que al mismo tiempo, no puede romper con los socialistas sin ser acusado de actuar contra la unidad de la izquierda. De hecho, en estos d¨ªas los comunistas han empezado por primera vez a declarar que la pol¨ªtica del ?comprorniso hist¨®rico? no tiene nada que ver con las f¨®rmulas de Gobierno, las cuales pasado este per¨ªodo de urgencia que exige un Gobierno de unidad nacional, pueden variar y alternarse. Por lo que se refiere a la Democracia Cristiana, el Partido Comunista est¨¢ muy atento en este momento al pr¨®ximo nombrarniento del nuevo presidente del Consejo Nacional, en sustituci¨®n de Aldo Moro. Este delicado problema lo decidir¨¢ la DC el viernes pr¨®ximo durante el Consejo Nacional. De este nombramiento, los comunistas podr¨¢n intuir si la DC desea seguir en la pol¨ªtica de colaboraci¨®n y de ?confrontaci¨®n? continuando la l¨ªnea de Moro, o si prefiere acercarse a los socialistas como desear¨ªan Fanfani y Donat Cattin, el batallador ministro de Industria.
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