La crisis de la prensa, en cifras

Hablar nuevamente de la crisis de la prensa amenaza con convertirse en un t¨®pico, pero por lo mismo resulta tambi¨¦n una necesidad. La prensa, como los toros, se encuentra en crisis casi desde que este mundo que vivimos alcanz¨® el uso de la raz¨®n. La aparici¨®n de nuevos medios de informaci¨®n, la elevaci¨®n de los costos de producci¨®n especialmente mano de obra y materias primas-, las dificultades y encarecimientos en la distribuci¨®n y la propia crisis econ¨®mica general son factores que desde hace largo tiempo han convertido a la prensa de las sociedades industrializadas en un sector de dudosa rentabilidad y abundantes riesgos.En nuestro pa¨ªs la desaparici¨®n del anterior r¨¦gimen y el tr¨¢nsito pol¨ªtico animaron la creaci¨®n de nuevas empresas period¨ªsticas y un aluvi¨®n de t¨ªtulos se volc¨® sobre los quioscos. Pero despu¨¦s de una etapa de entusiasmo y relanzamiento del sector, y coincidiendo a un tiempo con la pol¨ªtica del consenso y la radicalizaci¨®n de la crisis econ¨®mica, los peri¨®dicos diarios y los semanarios comenzaron a sufrir serias p¨¦rdidas en su circulaci¨®n y en sus carteras de publicidad y tambi¨¦n, como es l¨®gico, en sus cuentas de resultados. Hay que poner de relieve que esta coincidencia de la crisis de los peri¨®dicos con las crisis econ¨®micas generalizadas no es nueva. En Estados Unidos las estad¨ªsticas comprueban que van siempre de la mano: a mayor depresi¨®n en la inversi¨®n, menor circulaci¨®n de prensa.

Ahora se acaban de hacer p¨²blicas oficialmente las cifras de la Oficina de Justificaci¨®n de la Difusi¨®n (OJD) -¨²nico organismo fiable en sus datos- sobre la circulaci¨®n de la prensa de Madrid en el per¨ªodo del mes de julio de 1977 a junio de 1978, ambos inclusive. En lo que se refiere a los principales peri¨®dicos de la capital, su difusi¨®n media, certificada para dicho per¨ªodo, es la que figura en el gr¨¢fico.

Como puede verse, s¨®lo un diario, El Alc¨¢zar, ha mejorado notablemente su difusi¨®n, y s¨®lo EL PAIS ha mantenido ¨¦sta, mientras que los dem¨¢s peri¨®dicos han visto mermar considerablemente sus tiradas. Hay que hacer notar, sin embargo, que esta ca¨ªda de las ventas viene de anta?o y que el ejercicio anterior al ahora controlado tiene la particularidad de incluir en su control el mes de junio de 1977, que con las elecciones generales supuso un aumento notable de tiradas.

Un an¨¢lisis somero del cuadro sit¨²a a EL PAIS como el segundo diario de informaci¨®n general por su difusi¨®n de los editados en la capital (despu¨¦s del Abc. Esto nos sit¨²a los terceros a nivel nacional, toda vez que La Vanguardia, de Barcelona, supera al Abc. El aumento de tirada de El Alc¨¢zar, m¨¢s que un fen¨®meno exclusivamente period¨ªstico, parece estar ligado a las marcadas posiciones pol¨ªticas que mantiene. El Alc¨¢zar es el refugio de una ideolog¨ªa, no un diario en el moderno sentido de la palabra. Pero en cualquier caso tiene derecho a ser como es, y los rumores sobre el aumento de las tiradas de la prensa de ultraderecha obtienen ahora su cuantificaci¨®n concreta en las cifras de la OJD.

Estos datos que se comentan, por lo dem¨¢s, se refieren a difusi¨®n y no a tirada, y son las medias de todo un a?o. Faltan en el cuadro algunos peri¨®dicos como Diario 16, que no ha sido controlado, o El Peri¨®dico, de reciente aparici¨®n, m¨¢s los deportivos, que han experimentado ligeros descensos en el mismo per¨ªodo. Tambi¨¦n falta El Imparcial -pendiente de control-, de caracter¨ªsticas similares a El Alc¨¢zar, y que en cierta medida podr¨ªa estar subiendo ahora en su tirada da?ando la propia de dicho vespertino. Igualmente es preciso se?alar que estas cifras medias est¨¢n sometidas a variaciones mensuales considerables.

Otros datos, sin duda de inter¨¦s para nuestros lectores, es la tirada media real -y no s¨®lo la difusi¨®n- de nuestro peri¨®dico, pues es de tiradas de lo que normalmente se habla en la prensa internacional. La propia OJD certifica para EL PAIS una cifra de tirada ¨²til en el per¨ªodo controlado de 157.946 ejemplares. Hay que se?alar tambi¨¦n que tanto tirada como difusi¨®n crecen notablemente para toda la prensa madrile?a los domingos. EL PAIS del domingo tir¨® as¨ª en el mismo per¨ªodo 208.653 y su difusi¨®n media fue de 181.495 ejemplares. En el mes de junio, ¨²ltimo del control, esta difusi¨®n era, no obstante, ya de 187.180.

Por lo dem¨¢s, y habida cuenta de que el estudio realizado por la empresa Sofemasa sobre el perfil de nuestros lectores arroja una media de 3,7 personas por ejemplar, el ¨ªndice medio de multilectura de EL PAIS es de 474.850 lectores diarios. Sobre el perfil de los mismos puede consultarse el n¨²mero de nuestro peri¨®dico del pasado 4 de mayo de 1978.

Estas son pues, las cifras reales de la crisis de la prensa. Durante los meses de octubre y noviembre parece que existe una tendencia a la nivelaci¨®n y la crisis se ha visto m¨¢s agudizada en la contrataci¨®n de publicidad que en las ventas. Como puede verse, EL PAIS ha resistido bien la ¨¦poca de las vacas flacas, aunque evidentemente tambi¨¦n ha padecido sus efectos. La animaci¨®n de la vida pol¨ªtica despu¨¦s del refer¨¦ndum, las elecciones municipales y la eventualidad de unas generales, y la posible mejor¨ªa de la situaci¨®n econ¨®mica favorecer¨¢n, sin duda, el relanzamiento del sector. Pero ¨¦ste se encuentra aquejado de serios problemas estructurales sin cuya soluci¨®n dif¨ªcilmente podr¨¢ contarse en Espa?a con una prensa democr¨¢tica y moderna.