Callaghan no declarar¨¢ el estado de emergencia en Gran Breta?a

La primera declaraci¨®n del jefe del Gobierno brit¨¢nico a su llegada a Londres, tras su estancia en el Caribe, ha sido asegurar que no declarar¨¢ el estado de emergencia.

La persistente anormalidad en el frente laboral se ha visto agravada por la posibilidad de una huelga nacional de ferrocarriles, la semana pr¨®xima, y la perspectiva de que el conflicto de los camioneros se haga total antes del fin de semana, lo que virtualmente paralizar¨ªa la vida econ¨®mica del pa¨ªs. El Gabinete se re¨²ne hoy para estudiar de nuevo la situaci¨®n.

La paulatina mejor¨ªa del abastecimiento de las gasolineras motivada por la aceptaci¨®n de la mayor¨ªa de los conductores de veh¨ªculos cisterna de un aumento salarial del 15 % ha sido contrapesada por la extensi¨®n de la huelga de los transportistas privados. Su poderoso sindicato decide hoy si casi 200.000 hombres van a un paro nacional en defensa de sus reivindicaciones salariales: un 22 %, frente al 15 % ofrecido por la patronal. Son ya 50.000 los camioneros en huelga, antes de que su acci¨®n haya sido declarada oficial.

La Confederaci¨®n de Empresarios ha anunciado que si el paro se consurna, cerca de un mill¨®n de trabajadores ser¨¢n enviados temporalmente a su casa. Los suministros industriales y agropecuarios est¨¢n ya severamente afectados, y numerosas empresas -de sectores tan diversos como el sider¨²rgico, el qu¨ªmico o el alimenticio- afrontan ya una aguda escasez de materias primas. En los puertos brit¨¢nicos, mientras tanto se apilan las mercanc¨ªas no transportadas.

?Ensayo general? de huelga

Los conductores ferroviarios, por su parte, efectuaron ayer un ?ensayo ge neral?, paralizando el tr¨¢rico de la regi¨®n sur de Londres, en la que residen decenas de millares de personas que trabajan a diari¨® en la capital y se desplazan en tren. Su sindicato exige un 10 % de subida en concepto de prima por responsabilidad, aumento que British Rail se resiste a conceder, argumentando que repercutir¨ªa inevitablemente en una nueva alza de las ya elevadas tarifas que paga el usuario. Las negociaciones prosiguen contra el reloj, y fuentes sindicales no descartan un compromiso en las pr¨®ximas horas si se concreta una oferta del Ministerio de Transportes en forma de plus de productividad.La oposici¨®n conservadora intenta obtener el m¨¢ximo capital pol¨ªtico de la situaci¨®n laboral. Con la mirada puesta en las pr¨®ximas elecciones generales, el partido de la se?ora Thatcher acusa al laborismo de ineficacia e inacci¨®n.

Vista con la lupa tory, de ?caos creciente?, la anormalidad actual es de las que piden un estado de emergencia. Las palabras, en Heathrow, del se?or Callaghan, quien calific¨® de ?parroquial? esta perspectiva, est¨¢n destinadas a desactivar parte del impacto pol¨ªtico conservador en la opini¨®n p¨²blica.