El Islam, la principal fuerza de oposici¨®n al r¨¦gimen de Kabul
El Gobierno prosovi¨¦tico de Taraki reconoci¨® recientemente la existencia de enfrentamientos armados en el interior del pa¨ªs y en la zona fronteriza con Pakist¨¢n. La informaci¨®n oficial est¨¢ velada por la propaganda y los informadores occidentales deben someterse a ciertos condicionamientos. Nuestro corresponsal en Mosc¨², Ismael L¨®pez Mu?oz, tuvo problemas en Kabul para enviar su art¨ªculo sobre la situaci¨®n de las fuerzas de oposici¨®n en Afganist¨¢n.
?Los terratenientes feudales, usureros, la burgues¨ªa, la parte reaccionaria de los cl¨¦rigos -seg¨²n informa el diario The Kabul Times-, que se han aprovechado de la explotaci¨®n del pueblo, han pasado a la lucha armada abierta, al sabotaje, a los actos de terror¨ªsmo. Tratan de aprovechar las dificultades de los nuevos cuadros, que a¨²n no tienen experiencia en el trabajo, intentan jugar con la influencia de los prejuicios religiosos y siembran la discordia entre las tribus. El mot¨ªn de Herat ha demostrado que la reacci¨®n est¨¢ dispuesta a utilizar medios extremos en la lucha contra el pueblo. Incluso provocaciones armadas y el terror.?As¨ª qued¨® levantado oficialmente el velo informativo con este primer reconocimiento de una fuerte oposici¨®n al r¨¦gimen revolucionario de Taraki.
El presidente Taraki ha calmado al pueblo, de por s¨ª bastante indiferente, con unas declaraciones rotundas: ?Todo el territorio del pa¨ªs est¨¢ controlado por los poderes leg¨ªtimos. Nuestro joven ej¨¦rcito rechazar¨¢ deci.dido las provocaciones de los ?hermanos musulmanes? y otros contrarrevolucio narios que hacen incursiones en aldeas y poblados aprovechando la noche y matan, a mujeres y ninos.?
Grupos de oposici¨®n
El principal movimiento que se enfrenta a Taraki lo forma el Partido Isl¨¢mico Hezb-I-Islami (Hermanos Musulmanes), cuyo l¨ªder, Gulbeddin Hekmatyar, considera que ?el Islam es una ideolog¨ªa suficiente como para construir un pa¨ªs y luchar contra el comunismo. Nosotros -ha proclamado- estamos a favor de una democracia isl¨¢mica, en beneficio de todos los musulmanes afganos?. El otro movimiento religioso de extrema derecha, Jamiyat-I-Islam (Concentraci¨®n Isl¨¢mica), act¨²a bajo la influencia de Ustad Rabbani, quien desea derrocar al actual r¨¦gimen por ?ateo, comunista y prosovi¨¦tico e instaurar un r¨¦gimen fundado en el Islam?. Tampoco falta el Frente de Liberaci¨®n Nacional, un peque?o grupo que se ha unido a los movimientos religiosos.Existe, asiniismo, una cooperaci¨®n con los grupos afgano-maoistas Shulayi Jaweed (La Llama Eterna) y SOPJA, muchos de cuyos miembros fueron instruidos en China, seg¨²n. informaciones sovi¨¦ticas, para las pr¨¢cticas de sabotaje y terrorismo. Por ¨²ltimo, otra tendencia de oposici¨®n al actual Gobierno de la Rep¨²blica Democr¨¢tica de Afganist¨¢n es el grupo Setem-I-Melli (Contra la resi¨®n y la Tiran¨ªa), cuyo cuadr dirigente estab,a formado por una troika, Taher Badakhshi, el poeta Vasel Bakhtalil y un personaje que ha sido calificado de ?m¨ªstico y de ? leyenda?, cuyo, paradero no se sabe bien, aunque pudiera haber muerto en una acci¨®n de las guerrillas.
Para el Gobierno de Taraki, ninguno de estos numerosos grupos tendr¨ªa fuerza suflciente si no) estuviera apoyado desde el extranjero. Los principales ataques se dirigen a Pakist¨¢n, cuyo ministro de Asuntos Exteriores visit¨® Mosc¨² el pasado d¨ªa 2 y entreg¨® al primer ministro sovi¨¦tico, Alexei Kossiguin, un mensaje del presidente, Zia UI-Haq. Nada m¨¢s se ha sabido sobre esta conversaci¨®n, pero) todo parece indicar que el representante paquistan¨ª se refiri¨® a Ia posici¨®n de su pa¨ªs en el tema de los rebeldes afganos, a quienes ellos consideran refugiados, y explicar¨ªa, asim¨ªsmo, la ej ecuci ¨®n de Ali Bhuto, por cuya vida hab¨ªa intercedido recientemente el jefe, del Estado sovi¨¦tico, Le¨®nidas Breinev.
En los ¨²ltimos seis meses se han producido, adem¨¢s de las graves incidentes de Herat y la niuerte en Kabul del embajador norteamericano, vi¨®lentos choques en las provincias orientales de Badakhchan, sede del grupo Setem-I-Melli, Parwan y Paktian y en el centro del pa¨ªs, en Oruzgan, as¨ª como represiones sangrientas en Kamdeski Kunar, donde la poblaci¨®n sufri¨® los bombardeos de la artiller¨ªa igual que si se tratase de una guerra civil.
Acusaciones contra Ir¨¢n
Las acusaciones afganas se centran tambi¨¦n en Ir¨¢n, donde, al parecer, recientemente se reunieron, en la ciudad de Meched, unos ?cursillos de preparaci¨®n de los grupos terroristas para mandarles a Afganist¨¢n?, seg¨²n informa el diario Pravda. Para la Uni¨®n Sovi¨¦tica esta zona tiene especial inter¨¦s, ya que Meched se encuentra a pocos kil¨®metros de la frontera con la Rep¨²blica Sovi¨¦tica de Turmenia, regi¨®n en la que los musulmanes son mayor¨ªa, Sin embargo, los ataques principales se centran en el ayatollah Chariat Madari, segunda jerarqu¨ªa chiita iran¨ª, quien recientemente hizo un llamamiento ?a todos, los musulmanes del mundo, para sostener a los musulmanes afganos?. Estas intervenciones preocupan al Gobierno de Taraki, que mantiene en la nueva Rep¨²blica Isl¨¢mica un mill¨®n de compatriotas procedentes de la emigraci¨®n, que trabajar en distintas ciudades iran¨ªes.Estos d¨ªas todos los esfuerzos d¨ªas los l¨ªderes de Afganist¨¢n se centrar¨¢n en preparar el ambiente propicio para celebrar el aniversario de la revoluci¨®n en olor de multitud, como una forma de adhesi¨®n masiva del pueblo. Por estas feclias, hace un a?o, el antiguo presidente Daoud hab¨ªa organizado, precisa.. mente para el d¨ªa 27, una gran fiesta en su residencia.
La fiesta result¨® tr¨¢gica y junto a numerosos familiares suyos result¨® muerto por resistirse a la revoluci¨®n preparada por Taraki y Amin los hombres fuertes hoy de un pa¨ªs predestinado a no conocer una paz duradera.
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