El Ej¨¦rcito de Nicaragua siembra el terror y la muerte en todo el pa¨ªs
Un pat¨¦tico alegato, que resume claramente la dram¨¢tica situaci¨®n que vive Nicaragua, ha sido enviado por el obispo de la ciudad de Le¨®n, a noventa kil¨®metros al Oeste de Managua, al presidente Anastasio Somoza. La carta, titulada La muerte camina impune por Nicaragua, divulgada por las agencias de informaci¨®n, ha provocado nuevos ataques de la dictadura somocista contra la jerarqu¨ªa eclesi¨¢stica nicarag¨¹ense, alineada en su mayor¨ªa con los que luchan por derrocar al actual r¨¦gimen. Mientras tanto, se han producido nuevos combates entre tropas de la Guardia Nacional y guerrilleros en el norte del pa¨ªs, y la emisora clandestina ha anunciado una nueva ofensiva.
?La metr¨®poli que espiritualmente dirijo -dice la carta de monse?or Manuel Salazar- es una ciudad ocupada y muerta. Las tropas del Ej¨¦rcito van y vienen por las calles sembrando el terror y segando vidas, sin escaparse ni los ni?os. ?Es matando como van a solucionarse los problemas de la patria? Ya no se puede tolerar que siga la muerte segando vidas de los hombres, sin juicio ninguno, y s¨®lo prevalezca la ley de la selva.??Se?or presidente -finaliza la misiva-, ponga fin a tanto dolor. Hay much¨ªsimos hogares que lloran la p¨¦rdida de seres queridos. La patria se est¨¢ quedando sin los hombres del ma?ana.?
Como para corroborar las palabras del obispo, ayer se anunci¨® la muerte de cuatro j¨®venes en Le¨®n y de cinco en Managua, todos por la Guardia Nacional somocista. Desde hace m¨¢s de tres semanas, y sobre todo al finalizar la ocupaci¨®n de Estel¨ª por el Frente Sandinista, todos los d¨ªas se conoce la muerte de alrededor de diez j¨®venes en distintos lugares del pa¨ªs. Es como si la Guardia Nacional hubiera recibido la tr¨¢gica consigna de llenar un determinado cupo de cad¨¢veres cada jornada.
La agitaci¨®n no ha cesado un solo d¨ªa desde hace m¨¢s de un mes. Durante las horas de sol, las ciudades aparecen pac¨ªficas y normales. En cuanto la tarde cae, los guerrilleros se hacen due?os de amplias zonas urbanas y rurales. En estas horas, los soldados de la Guardia Nacional realizan rastreos y asesinan muchachos. ?Ser joven se ha convertido en un delito?, dec¨ªa no hace mucho un dirigente del ?Grupo de los Doce?.
Entre tanto, contin¨²a la huelga general de estudiantes iniciada hace una semana. A este paro se han sumado centenares de m¨¦dicos y enfermeras, que protestan por la muerte de tres colegas en la ciudad de Estel¨ª. Las oficinas de la Organizaci¨®n Mundial de la Salud y de la Organizaci¨®n de Estados Americanos fueron ocupadas el jueves por estos huelguistas.
Radio Sandino, emisora clandestina del FSLN, ha redoblado en los ¨²ltimos d¨ªas sus consignas para que la poblaci¨®n civil acumule a limentos y agua para hacer frente a la ?nueva ofensiva? que el Frente anuncia. La emisora asegur¨® que a Somoza ?le quedan dos meses de vida en la presidencia?.
Ayer se inform¨® que un nuevo combate entre tropas de la Guardia Nacional y un grupo de guerrilleros sandinistas dej¨® el saldo de tres muertos y siete heridos, tras cinco horas de lucha, en San Juan del R¨ªo Coco.
Los muertos son un soldado del Ej¨¦rcito y dos guerrilleros no identificados. Tambi¨¦n result¨® herido otro militar, lo mismo que seis sandinistas, quienes se replegaron a las monta?as cercanas.
Mientras tanto, seg¨²n se inform¨® en Managua, una furgoneta del Banco Nicarag¨¹ense (Banic) fue interceptada por cuatro hombres armados en el sur del pa¨ªs.
Informes extraoficiales dieron a conocer que los asaltantes
-supuestos militantes de la guerrilla urbana sandinista- se apoderaron del dinero del veh¨ªculo bancario, estimado en alrededor de 1.700.000 c¨®rdobas (cerca de doce millones de pesetas).
Tambi¨¦n despojaron de sus armas a cuatro hombres armados del personal de vigilancia del banco que iban en la furgoneta.
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