Su¨¢rez y sus colaboradores deciden "no echar le?a al fuego" en la crisis del PSOE

El presidente del Gobierno habl¨® el pasado lunes con el ex secretario general del PSOE, Felipe Gonz¨¢lez, al d¨ªa siguiente de la clausura del XXVIII Congreso del PSOE, seg¨²n se supo ayer en medios oficiosos. El Gobierno y el partido de UCD no echar¨¢ le?a al fuego en la crisis abierta en el PSOE con la retirada de Felipe Gonz¨¢lez, seg¨²n decisi¨®n tomada por el presidente Su¨¢rez en una reuni¨®n con sus m¨¢s inmediatos colaboradores.

Seg¨²n informa la agencia Efe, en la valoraci¨®n pol¨ªtica realizada por el presidente del Gobierno y sus colaboradores, se destaca la habilidad y sabidur¨ªa pol¨ªtica de Felipe Gonz¨¢lez, ?que ha sido capaz de convertir en victoria una derrota en el congreso de su partido?, as¨ª como la trayectoria y limpieza moral del l¨ªder socialista.Del an¨¢lisis gubernamental se desprende tambi¨¦n la conclusi¨®n de que la crisis socialista s¨®lo puede tener un ganador, el PCE, con el consiguiente riesgo de italianizaci¨®n de la pol¨ªtica espa?ola, lo cual se ve con preocupaci¨®n en ¨¢reas gubernamentales, ya que las razones de Estado priman, seg¨²n ese an¨¢lisis, sobre las consideraciones de partido.

Los elogios de fuentes gubernamentales a Felipe Gonz¨¢lez suponen un cambio en la actitud de UCD respecto al PSOE, y m¨¢s exactamente, respecto a la l¨ªnea representada por el ex secretario general socialista, que contin¨²a al frente del Grupo parlamentario del PSOE. En las actuales circunstancias, UCD ve alejarse la posibilidad de que el Partido Socialista contin¨²e la ofensiva contra aqu¨¦l, e incluso puede esperar un debilitamiento de la alianza PSOE-PCE en los ayuntamientos, pero es evidente que prefiere una victoria final de Felipe Gonz¨¢lez en la confrontaci¨®n interna socialista, a fin de mantener el statu quo actual.

Por su parte, los diputados socialistas mantuvieron ayer varias conversaciones en los pasillos de las Cortes. Entre otros, se vio reunidos a Alfonso Guerra, Rafael Escuredo y Manuel Mar¨ªn con Rodolfo Guerra, miembro este ¨²ltimo del Grupo Socialistas de Catalu?a.

Prosigue la controversia

Mientras tanto, prosiguen las declaraciones de dirigentes o militantes socialistas destacados, en relaci¨®n con la pol¨¦mica interna. Enrique M¨²gica ha declarado a Europa Press que ?los que plantean el problema o marxismo o socialdemocracia son maniqueos de v¨ªa estrecha?. Asimismo, dice que las clases trabajadoras no est¨¢n formadas s¨®lo por trabajadores industriales; ?donde hay un gran resto de servicios, de empleados, t¨¦cnicos, profesionales, etc¨¦tera, se plantea el problema de un socialismo adaptado a las exigencias de estas clases trabajadoras?.El se?or M¨²gica, adem¨¢s de elogiar a Felipe Gonz¨¢lez desde todos los puntos de vista posibles, no descarta que haya habido inmadurez en algunos sectores del congreso, pero estima que en el pr¨®ximo ?el buen sentido, la com¨²n reflexi¨®n, la serena convivencia, la fraternal solidaridad, se impondr¨¢n sobre cualquier crispaci¨®n?. Tambi¨¦n asegura que el t¨¦rmino marxismo no ha sido desechado por nadie; ?lo que pasa es que hay un grupo de compa?eros que defienden un paleomarxismo que es bueno para el siglo pasado?.

Por su parte, el secretario de organizaci¨®n de la Federaci¨®n Socialista Madrile?a, Manuel Abej¨®n -defensor, junto con Francisco Bustelo, de la ponencia pol¨ªtica aprobada-, ha declarado que no se puede acusar alegremente de radicalismo o inmadurez a quienes defendieron las resoluciones del XXVIII Congreso. ?La ponencia pol¨ªtica era muy parecida a la del anterior, y sigui¨® el esquema tradicional de Pablo Iglesias y Juli¨¢n Besteiro: ser muy firmes en los principios, pero flexibles en la estrategia. El resto de las resoluciones, aunque demasiado detalladas en alg¨²n caso, tampoco eran catastrofistas: se quit¨® la alusi¨®n a la Rep¨²blica, precisamente por intervenci¨®n m¨ªa, ya desde la misma comisi¨®n; se quit¨® en el pleno la referencia a la autodeterminaci¨®n, se suaviz¨® el tema del aborto, se quit¨® el p¨¢rrafo en que se eliminaban las subvenciones a la ense?anza privada; en fin, creo que se trabaj¨® de forma bastante responsable, pese a lo que algunos digan.?

?Despu¨¦s?, prosigui¨® el se?or Abej¨®n, ?ha resultado que los mismos que llevaron la l¨ªnea pol¨ªtica del congreso anterior se han negado a hacerlo ahora, con una l¨ªnea pol¨ªtica a¨²n m¨¢s matizada y gradualista que la del XXVII Congreso. La verdad es que no acabo de entenderlo.?

Pol¨¦mica de adjetivos

En cuanto a la pol¨¦mica en s¨ª, todo parece indicar que el anunciado per¨ªodo de reflexi¨®n a¨²n no se ha iniciado en el PSOE, y en realidad se asiste m¨¢s bien a un cruce de adjetivos, que quiz¨¢ vaya in crescendo conforme avance el tiempo. Ambas partes se han lanzado ya a la cara dos de los t¨¦rminos que m¨¢s ara?azos causan en el sector socialista: ?Socialdem¨®cratas?, dicen unos; ?criptocomunistas?, otros. Lo cual, m¨¢s que clarificar posiciones propias, parece m¨¢s bien un intento de definir al adversario. Por eso, la pol¨¦mica parece todav¨ªa un tanto falsa y artificial y es dudoso que las posiciones aparentemente delineadas en estos momentos -Felipe Gonz¨¢lez contra Francisco Bustelo, o viceversa- reflejen dos alternativas firmes para el congreso extraordinario de septiembre u octubre.