"La Clave": sistemas pol¨ªticos

Una vez m¨¢s La clave, el programa que dirige Jos¨¦ Luis Balb¨ªn, polariza la atenci¨®n de la programaci¨®n del s¨¢bado, pese a que el ¨²nico programa de debate, en directo, de TVE, no cuenta con las simpat¨ªas de los ejecutivos, tiene prohibidos media docena de temas -homosexuales, la banca, etc¨¦tera- y se ponen toda suerte de trabas administrativas, como la bochornosa negativa de abonar las 100.000 pesetas a Truman Capote y las amenazas de cortar la emisi¨®n cuando el programa no discurre por los senderos de Prado del Rey.Santiago Carrillo (secretario general del PCE), Manuel Jim¨¦nez de Parga (catedr¨¢tico de Derecho Pol¨ªtico), Carl Curtys (senador norteamericano por el estado de Nebraska), Walter Hofer (vicepresidente de la Comisi¨®n de Asuntos Pol¨ªticos del Consejo de Europa) y Jos¨¦ Mar¨ªa Gil Robles (abogado) discutir¨¢n a prop¨®sito de los distintos ?sistemas pol¨ªticos?. Herbert Marcuse es el gran ausente del programa. Viaj¨® desde California a Europa, expresamente para el programa La clave, pero se encuentra ahora internado en una (cl¨ªnica de Francfort a consecuencia de una bronconeumon¨ªa y ataque al coraz¨®n.

Se emite previamente el largometraje Viva Zapata, de Elia Kazan (1952). Un campesino analfabeto, Emilio Zapata (Marlon Brando); su hermano, Eufemio (Anthony Quinn), y el extra?o periodista Aguirre (Joseph Wiseman) acaudillan la revoluci¨®n de los campesinos contra Porfirio D¨ªaz. Zapata, ya general, asume el poder despu¨¦s del asesinato del presidente Madero (Harold Gordon) y se refugia m¨¢s tarde en las monta?as en compa?¨ªa de su mujer, Josefa (Jean Peters), y de sus hombres hasta que muere asesinado en una emboscada. Elia Kazan ha conseguido una pel¨ªcula de gran belleza cinematogr¨¢fica en algunos momentos, pero que ideol¨®gicamente queda a medias tintas, como un canto a la revoluci¨®n imposible.