"Holocausto" (Tercer episodio)
La familia jud¨ªa de los Weiss ha sido disgregada. Joseph, el padre, ha sido deportado a Polonia, su tierra natal, y trabaja como m¨¦dico en el ghetto de Varsovia. Su mujer, Berta, tambi¨¦n es expulsada de Alemania en 1941. Se une a su marido en Varsovia, quien, junto al t¨ªo Mois¨¦s, forma parte de uno de los primeros consejos jud¨ªos organizados para resistir a los nazis. La situaci¨®n de la familia es desesperada. Berta cuenta a Joseph el final de Ana y la huida de Rudi, mientras ella se dedica a dar clases a los ni?os del ghetto.
Mientras tanto, Inga, aria y cat¨®lica, mujer de Karl, que se encuentra recluido en el campo de Buchenwald, hace dos a?os que intenta ponerse en contacto con su marido. El sargento Heinz Muller viejo amigo de la familia de los Helms, quien a?os atr¨¢s dese¨® casarse con Inga y la reproch¨® su matrimonio con un jud¨ªo, es ahora uno de los jefes del campo. Muller hab¨ªa prometido a Inga arreglar la situaci¨®n para que pudiese ver a Karl y ahora se compromete a intercambiar sus cartas y evitar que muera Karl a cambio de que se entregue a ¨¦l. ?Mir¨® fijamente al techo del barrac¨®n, escuch¨® sus gru?idos y quejidos, aguant¨® pacientemente las torpes arremetidas... y le odi¨®?, escribe Gerald Green.
Las tropas alemanas preparan la ofensiva en el frente ruso. El general Heydrich concede a Erik Dorf su m¨¢xima confianza y lo sit¨²a por encima de los oficiales de m¨¢s alta graduaci¨®n. Rudi y Helena, la joven jud¨ªa checoslovaca que le salv¨® de la polic¨ªa, logran escapar y pasan a Rusia. Contemplan, cerca de Kiev, la matanza de 30.000 jud¨ªos en Babi-Yar. La familia de Dorf celebra la Navidad en Berl¨ªn, acompa?ados del t¨ªo Kurt. Erik le regala a su esposa Marta un piano, producto de la expropiaci¨®n de una familia jud¨ªa. Algunas de las notas no suenan bien y se procede a afinarlo. En el interior del Bechstein se encuentran algunas fotograf¨ªas de los antiguos propietarios, que obstru¨ªan las cuerdas e imped¨ªan entonar el villancico Noche de paz. Las fotograf¨ªas de los Weiss son quemadas junto con las envolturas de los regalos.
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