La participaci¨®n tema del congreso de la Federaci¨®n Internacional de Maestros

La participaci¨®n de la comunidad escolar en la gesti¨®n del sistema educativo y la sanidad escolar son los dos temas centrales del congreso anual de la Federaci¨®n Internacional de Asociaciones de Maestros (FIAI-IFTA), que ayer se inici¨® en Madrid bajo la organizaci¨®n de la Federaci¨®n de Trabajadores de la Ense?anza de la Uni¨®n General de Trabajadores (FETE-UGT).

La FIAI es una de las dos federaciones in iternacionales que constituyen la Confederaci¨®n Mundial de Organizaciones de Profesionales de la Ense?anza (CMOPE), que cuenta actualmente con unos 600.000 afiliados, pertenecientes a dieciocho organizaciones profesionales de quince pa¨ªses, seg¨²n explic¨® su presidente, Jean-Jacques Maspero, en el curso de una rueda de prensa.Se?al¨® el se?or Maspero que el inter¨¦s de este tipo de reuniones resid¨ªa fundamentalmente en el enriquecimiento de la realidad de cada una de las organizaciones asistentes, pues este es el fruto principal de la confrontaci¨®n de experiencias. A?adi¨® que, en general, todas las organizaciones profesionales y sindicales tienden a vivir encerradas en s¨ª mismas, lo que constituye un verdadero peligro para su propia supervivencia.

Por su parte, Jer¨®nimo Nieto, representante de FETE-UGT, anticip¨® las l¨ªneas de la ponencia sobre Participaci¨®n de la comunidad escolar en la gesti¨®n del sistema educativo, que esta federaci¨®n sindical someter¨¢ al estudio de los congresistas.

Indic¨® el se?or Nieto que FETE-UGT hab¨ªa planteado a los pa¨ªses participantes en el congreso una serie de cuestiones previas, que sin duda permitir¨ªan alcanzar un conocimiento bastante completo de la situaci¨®n actual de la participaci¨®n democr¨¢tica en la gesti¨®n educativa: en que naciones se han conseguido mayores cotas de participaci¨®n, d¨®nde la participaci¨®n tropieza con mayores dificultades y, sobre todo, cu¨¢les son sus ventajas e inconvenientes.

Desde el punto de vista de FETE-UGT, la gesti¨®n del sistema educativo debe asentarse sobre una participaci¨®n tripartita: Administraci¨®n, profesionales -docentes y no docentes- de la instituci¨®n escolar y los alumnos y padres. En el caso concreto de nuestro pa¨ªs, esto implica la necesidad de una considerable descentralizaci¨®n de funciones y competencias.

El representante de FETE-UGT reivindic¨® la plena participaci¨®n del profesorado en todas las decisiones que afectan al ¨¢mbito pedag¨®gico y did¨¢ctico, y expuso la peculiar proposici¨®n del sindicato socialista para hacer efectiva la participaci¨®n a trav¨¦s de la creaci¨®n de consejos escolares en todos los niveles: estatal, regional, comarcal, local y de centros.

En cuanto a la direcci¨®n de los centros, Jer¨®nimo Nieto explic¨® que FETE-UGT est¨¢ a favor de su car¨¢cter electivo, pero precis¨® que mucho m¨¢s importante que el hecho de que el director sea elegido por la comunidad escolar es que ¨¦sta participe de manera real en la gesti¨®n del centro y que los poderes de la direcci¨®n est¨¦n compartidos.

En relaci¨®n con este mismo tema, el secretario general de la FIAI, Jean Daubard, dijo que si bien en Francia los directores son nombrados por la Administraci¨®n, las organizaciones sindicales disponen de unas garant¨ªas de participaci¨®n en el proceso de tales nombramientos. Existen unas comisiones paritarias compuestas por cinco representantes de la Administraci¨®n y otros cinco representantes sindicales.

Manuel Grac¨ªa, vicepresidente de la FIAI y secretario general de FETE-UGT, en respuesta a determinadas preguntas de los informadores en torno al escaso nivel de participaci¨®n real de los padres aun en las condiciones legislativas m¨¢s favorables, se?al¨® que se trata de una cuesti¨®n que desborda el ¨¢mbito de las organizaciones profesionales de educadores. A?adi¨® que de este problema son muy conscientes dichas organizaciones, como se hab¨ªa puesto de manifiesto en el ¨²ltimo congreso de sindicatos de maestros de Francia, donde se constat¨® una vez m¨¢s que la participaci¨®n de los padres se reduce a determinadas ¨¦lites. ?Lamentablemente?, concluy¨®, esto es as¨ª, pero es necesario advertir que para que se produzca un nivel de mayor participaci¨®n de los padres de una comunidad educativa son necesarios unos cambios de orden social y econ¨®mico que en muchos pa¨ªses todav¨ªa no se han dado. ?