El peat¨®n, perseguido
El caminar por esta ciudad cada vez resulta m¨¢s odioso. Los coches, cada vez m¨¢s numerosos, lo invaden todo. Se aparca en cualquier parte, llegando a situaciones en las que no se puede seguir avanzando por una acera, ya que, adem¨¢s del coche aparcado, te encuentras con las frecuentes vallas de obras que dejan un simb¨®lico trozo de acera por el que s¨®lo cabe una persona, teniendo que dejar pasar a la que viene de frente o, si hay prisa, atravesar la calle. En fin, todo muy c¨®modo. A esto hay que a?adir lo complicado y trabajoso que se hace atravesar cualquier plaza c¨¦ntrica, Atocha, Cibeles o la calle del Doctor Esquerdo; andar por estos sitios supone bajar escaleras, pasillos subterr¨¢neos, algunos escalofriantes, y volver a subir escaleras. Todo esto, para que los coches no tengan ning¨²n problema y el peat¨®n no se juegue el tipo, pero eso s¨ª, a costa de perder tiempo y esfuerzo el paciente caminante.Son muchos los peatones que mueren atropellados por invadir la calzada. Ser¨¢ cierto. Sin embargo, yo he visto c¨®mo tambi¨¦n los coches invaden continuamente los pasos de peatones al estar verde para el peat¨®n y ¨¢mbar para el automovilista, con lo cual, el cruzar una calle supone jugarte la vida o estar escayolado unos meses, y no digamos c¨®mo se los saltan en rojo.
Los peatones somos personas que tambi¨¦n tenemos derecho a movernos por la ciudad sin que nos marginen. Estamos en continuo peligro, y sobre todo los ancianos, ni?os y disminuidos f¨ªsicos, que no tienen el tiempo suficiente para cruzar, ya que el sem¨¢foro dura poco y los coches atacan como fieras, adem¨¢s de todas esas personas que vienen de pueblos y no se hacen a este mundo de la velocidad.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.