Duelo entre Scheckter, Villeneuve y Laffite por el mundial
Este domingo se disputa el Gran Premio de Holanda de F¨®rmula 1, duod¨¦cima prueba del campeonato del mundo y quinta de esta segunda mitad. El circuito de Zandvoort, que forma parte del grupo de los m¨¢s r¨¢pidos, debe ser escenario de un duelo por la victoria entre los Williams -los coches m¨¢s competitivos del momento- y los Renault -beneficiados por el turbocompresor-, aunque el inter¨¦s de la carrera se extienda tambi¨¦n al duelo entre Scheckter, Villeneuve y Laffite, ¨²nicos posibles aspirantes al t¨ªtulo mundial
El circuito de Zandvoort, con 4.226 metros de longitud, no tiene m¨¢s que una recta larga, donde se da la salida. El resto, est¨¢ repleto de curvas enlazadas, pero que se afrontan todas ellas a grandes velocidades. De esta forma, al completar un giro, los pilotos realizan un promedio general superior a los doscientos kil¨®metros por hora.Aunque el r¨¦cord oficial del circuito est¨¢ en poder del austriaco Niki Lauda, quien el pasado a?o logr¨® un tiempo de 1-19-57, en los entrenamientos de esta temporada los mejores clasificados, los que logren ocupar las primeras posiciones de la parrilla de salida, rondar¨¢n el tiempo de 1-14-00, muy por debajo incluso del registro que el pasado a?o daba la pole position a Mario Andretti
De cara a la victoria, el dominio de los Lotus en la ¨²ltima edici¨®n es irrepetible. Entonces, Andretti y Peterson, por ese orden, coparon los dos primeros puestos tanto en entrenamientos como en carrera. Este a?o, desaparecido Peterson y sustituido ¨¦ste por el argentino Reutemann, los Lotus no est¨¢n en condiciones t¨¦cnicas de poder repetir ese ¨¦xito, ocupando, generalmente, puestos s¨®lo discretos hasta que, por unas u otras razones, terminan por abandonar en todas las carreras. El genio indudable de Colin Chapman, capaz de crear una nueva t¨¦cnica como la Wing-car que todos han copiado, no ha podido resolver los problemas de suspensi¨®n surgidos en sus monoplazas cuando Good-Year, la marca que les suministra las ruedas a la gran mayor¨ªa de los coches en liza, decidi¨® aumentar el di¨¢metro de las traseras. Y, de esta forma, los Williams, Ligier, Tyrrell, etc¨¦tera, aut¨¦nticas reproducciones del Lotus, pero nacidas ya sobre la base de estas nuevas ruedas, resultan m¨¢s competitivos.
En Zandvoort, los Williams vuelven a partir como grandes favoritos. Junto a ellos, los Renault deben beneficiarse de la ventaja que da la sobrealimentaci¨®n que reciben a trav¨¦s del turbocompresor. Y, adem¨¢s, hay que a? adir a los Brabham -merced a la rivalidad entre Piquet y Lauda, y el deseo de este ¨²ltimo de aumentar su deca¨ªda cotizaci¨®n de cara a su traspaso para la pr¨®xima temporada- y los Tyrrell.
Pero el gran inter¨¦s se debe centrar en el duelo que sostengan entre s¨ª los tres ¨²nicos pilotos que pueden ya acceder al t¨ªtulo mundial, al surafricano Jody Scheckter, el canadiense Gilles Villeneuve -ambos sobre Ferrari- y el franc¨¦s Jacques Laffite con su Ligier. Aunque, al menos a priori, ni los Ferrari ni los Ligier pueden optar por la victoria, visto el aplastante dominio de Williams en las ¨²ltimas carreras, la clasificaci¨®n respectiva entre ellos -siempre, l¨®gicamente, en los puestos de vanguardia- puede ser decisiva de cara al desenlace final.
Hasta el momento, Scheckter cuenta con la ventaja de ir en cabeza, con seis puntos m¨¢s que sus dos rivales, igualados entre ellos. Eso permite al surafricano poder arriesgar menos, buscando s¨®lo sumar puntos m¨¢s que intentar la victoria a toda costa. Pero, por contra? Scheckter tiene ya tres de los cuatro posibles resultados que pueden sumarse en la segunda mitad del campeonato, y ninguno de ellos es bueno, mientras que sus -dos rivales, Villeneuve y Laffite, pueden sumar a¨²n dos cada uno.
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