La televisi¨®n en el mundo

El informe de la Unesco sobre la radiodifusi¨®n mundial durante los a?os 1960-1976 incluye algunas consideraciones sobre la televisi¨®n y , en particular, estad¨ªsticas a prop¨®sito del espectacular desarrollo de este medio.En 1936 s¨®lo un pa¨ªs, Gran Breta?a, estaba en condiciones de emitir programas regulares de televisi¨®n. En 1950 hab¨ªa cinco pa¨ªses, y 63, en 1960, entre ellos Espa?a. A partir de 1960 se observa un r¨¢pido crecimiento en la utilizaci¨®n de la televisi¨®n como servicio p¨²blico y como entidad comercial. En diecis¨¦is a?os se pasa de los 92.178 televisores que hab¨ªa en todo el mundo en 1960 a casi cuatrocientos millones de receptores en 1976. La multiplicaci¨®n de los transmisores para el env¨ªo y recepci¨®n de im¨¢genes refleja la importancia que se da en determinadas regiones a la televisi¨®n y pone de manifiesto el poder¨ªo de algunos pa¨ªses: Jap¨®n posee 6.117 transmisores sobre un total de 6.639 transmisores para toda Asia; Estados Unidos tiene 3.695 transmisores de los 4.595 de la regi¨®n que incluye a Canad¨¢ y pa¨ªses de Centroam¨¦rica; Francia, con m¨¢s de 3.000 transmisores, est¨¢ a la cabeza de Europa, seguida de la Uni¨®n Sovi¨¦tica, con 1.749, y de Italia, con 1.200 transmisores, mientras que Brasil y Argentina poseen el 50% de los transmisores de Am¨¦rica del Sur.

Espa?a ocupa el und¨¦cimo lugar en cuanto a pa¨ªses con mayor n¨²mero de televisores: 6.640.000 receptores, detr¨¢s de Polonia, en un r¨¢nking que encabezan Estados Unidos (121 millones de receptores) y la Uni¨®n Sovi¨¦tica (55 millones), seg¨²n datos de 1976. Por el contrario, Espa?a ocupa uno de los ¨²ltimos lugares, el 39, en cuanto al porcentaje de televisores por mil habitantes (186%0), entre Malta y Kuwait, mientras que en Estados Unidos hay un televisor por cada dos habitantes.

De acuerdo con el informe de la Unesco, TVE (datos de 1974) emiti¨® 3.519 horas anuales, que desglosadas por g¨¦neros de programas dan los siguientes porcentajes: 25,6% de espacios culturales, 21,7% de informativos, 21,8% de entretenimiento, 15%, de programas para audiencias especiales (incluye programas religiosos), 7,6% de publicidad y un 8,3% de programas que no pueden clas¨ªficarse en ninguno de los g¨¦neros convencionales.