Los Seis D¨ªas Ciclistas de Madrid, una gran fiesta olvidada

Corredores sobre la pista, atracciones en la pelousse, m¨²sica, famosos, ambiente... Los viejos aficionados madrile?os a¨²n recuerdan aquellas carreras de los ?Seis D¨ªas? que, desde el a?o 1959 al 1970, se celebraron en el Palacio de Deportes de Madrid. La afici¨®n respond¨ªa, los corredores cobraban y nada parec¨ªa amenazar su continuidad. Parejas como Bahamontes-Van Stenbergen, Poblet-Bover y Timoner-Tortell¨¢ se disputaban el favor de la afici¨®n. Los grandes monstruos de la ruta sol¨ªan acudir a la prueba, para mantener la actividad, pasear su gloria por la pista e ingresar buenos dineros.Una triste historia

En el a?o 1970, al organizador, Carlos Pardo, le crearon muchos problemas. Tuvo que cambiar la fecha habitual por otra menos favorable, por culpa de unos compromisos para ceder el Palacio de Deportes a un circo que tra¨ªa la recomendaci¨®n de Sol¨ªs. Samaranch, delegado de Deportes entonces, no quer¨ªa que hubiera circo en el Palacio, y comprometi¨® los ?Seis D¨ªas? para las fechas en que lo necesitaba el circo. Luego, Antonio Su¨¢rez, presidente de la castellana de ciclismo por entonces -y antes c¨¦lebre corredor-, le exigi¨® al promotor un canon exageradamente alto por permitirle celebrar la prueba; los acomodadores del Palacio le cobraron el 500% por nocturnidad, a partir de las once de la noche. Igualmente tuvo que pagar una cantidad alt¨ªsima por calefacci¨®n. Tantas pegas le desanimaron; Antonio Su¨¢rez le dijo que si otro a?o no quer¨ªa organizar la carrera, hab¨ªa cola para hacerlo. Carlos Pardo no organiz¨® m¨¢s pruebas de ?Seis D¨ªas?, y, desde entonces, no ha vuelto a haber. Ni apenas actividad en la pista del Palacio de Deportes.

Diecis¨¦is millones para Thurau

Madrid, pues, ha quedado fuera de un circuito que incluye a diecinueve ciudades: Gante, Londres, Munich, Colonia, Rotterdam, Maastricht, Kobenhavn, Amberes, Mil¨¢n, Grenoble, Charleroi, Dortmund, Berl¨ªn, Francfort, Zurich, Munster, Colonia, Bremen y Hannover. Como puede comprobarse, Alemania, Holanda y B¨¦lgica son los pa¨ªses de mayor afici¨®n por este tipo de carreras.

Las pruebas de ?Seis D¨ªas? su ponen un desgaste importante para los corredores, pero les pueden compensar, sobre todo, si saben dosificarse y si han alcanzado una cotizaci¨®n brillante. El alem¨¢n Dietricht Thurau ha sido contratado para ocho carreras del calendario. Por cada una de ellas le pagan cerca de dos millones de pesetas. Por este concepto, pues, ingresa una cantidad poco menor de los diecis¨¦is millones. Su esfuerzo invernal de todos los a?os ha hecho que, en la ruta, sus logros sean menores de lo que cab¨ªa esperar en sus comienzos, pero nadie puede discutir que su criterio es acertado en un profesional que no puede estar muchos a?os sobre la bicicleta. Ha sacrificado probables glorias deportivas en la carretera por sustanciosas ganancias en la pista, y nadie podr¨¢ llamarle tonto por eso.

Thurau es el favorito de la afici¨®n alemana, y de ah¨ª que su cotizaci¨®n sea m¨¢s elevada que la del mism¨ªsimo superes pecialista en este tipo de pruebas, el belga Patrick Sercu. Este, no,obstante, tampoco puede quejarse: participa en diecisiete de las diecinueve pruebas del calendario, y sale a mill¨®n por prueba. Trabaja mucho m¨¢s que el alem¨¢n, pero le quedan diecisiete millones de ganancias. Y hay que tener en cuenta que, al hablar de estas cifras, nos referimos s¨®lo a los fijos de salida. Las primas por ganar -Thurau y Sercu ganan casi siempre- incrementan esos ingresos.

El impresionante r¨¦cord de Sercu

Patrick Sercu ha conseguido colocarse en un lugar preferente en el libro de oro del ciclismo mundial. Este a?o, en Berl¨ªn, consigui¨® batir el r¨¦cord de victorias en pruebas de ?Seis D¨ªas?, que hasta ahora pose¨ªa el holand¨¦s Peter Post, con 65. Formando pareja con Thurau -en muchas ocasiones corren juntos estos dos hombres- logr¨® su victoria n¨²mero 66 sobre 170 participaciones, que tambi¨¦n es buen n¨²mero. Sercu comenz¨® sus andanzas en los ?Seis D¨ªas? con Eddy Merckx, con el que alcanz¨® quince victorias; Merckx, luego, se entreg¨® de lleno a la ruta y no se prodig¨® en la pista. Despu¨¦s form¨® pareja con el propio Peter Post, con el que alcanzar¨ªa trece victorias. Desde entonces ha sabido acompa?arse siempre de buenos corredores, y en la lista de sus companeros en victorias est¨¢n nombres como Bracke, Rudy Altig, De Vlaeminck, Pijnen, Maertens, Olle Ritter o Knetemann. Es, en t¨¦rminos absolutos, el corredor con m¨¢s victorias en la historia del ciclismo mundial, pues en la ruta tiene 67 como aficionado y 95 como profesional.

Dif¨ªcil retorno

?Podr¨¢ reintegrarse Madrid a este circuito? Es dif¨ªcil. Hace tiempo que el promotor de aquella ¨¦poca especula con esa posibilidad, pero no parece f¨¢cil. Hay problema de fechas, pues ahora es dif¨ªcil reincorporarse a ese apretado calendario en fechas propicias, la afici¨®n est¨¢ desconectada despu¨¦s de tantos a?os y no se sabe c¨®mo responder¨ªa en las primeras ediciones -aunque no cabe duda de que los ?Seis D¨ªas? terminar¨ªan prendiendo de nuevo-, los presupuestos son altos -por menos de diez millones no podr¨ªa hacerse- y se ha perdido, por el paso del tiempo, gran parte del material necesario, que ahora ser¨ªa preciso reponer. El terreno perdido es dif¨ªcil de recuperar, pero merecer¨ªa la pena.