Ha muerto el director de cine Pedro Lazaga

Ayer falleci¨® en Madrid, a los 61 a?os, Pedro Lazaga. Internado hace unas semanas en el sanatorio R¨²ber, el pasado mi¨¦rcoles fue operado de un tumor cerebral. Era uno de los m¨¢s caracter¨ªsticos directores de cine espa?ol, dado que en treinta a?os de profesi¨®n hab¨ªa realizado casi cien pel¨ªculas, especialmente comedias.

Pedro Lazaga nace en Tarragona, en 1918. Interviene en la guerra civil en el lado republicano. Una vez finalizada, es internado en un campo de concentraci¨®n. Para poder escapar de esta situaci¨®n se alista en la Divisi¨®n Azul. Interesado desde siempre por el cine, en alguna ocasi¨®n ha contado que durante la guerra recorr¨ªa veinticuatro kil¨®metros para ver una pel¨ªcula. Empieza a trabajar como guionista en cuanto las circunstancias se lo permiten.Debuta en 1948 con Encrucijada, pero hasta que, en 1954, hace La patrulla no dirige con regularidad. De esta primera etapa de su obra destaca Cuerda de presos (1955), su pel¨ªcula m¨¢s alabada por la cr¨ªtica, pero que es un gran fracaso comercial. Hace algunas historias propagand¨ªsticas sobre la guerra civil: La patrulla, El frente infinito (1956), Torrepartida (1956), y m¨¢s adelante, La fiel Infanter¨ªa (1958) y Posici¨®n avanzada (1965).

Entre 1957 y 1961 trabaja para Agata Films, la productora del guionista Jos¨¦ Luis Dibildos. Entre ambos crean un nuevo g¨¦nero de comedia espa?ola, a base de anodinas historias de parejas que se desarrollan en ambientes lujosos, con un claro trasfondo sainetesco. Son Muchachas de azul (1957), Luna de verano (1958), Los tramposos (1958), etc¨¦tera.

Entre 1966 y 1970 trabaja para Pedro Mas¨®, en un tipo de comedia que es la consecuencia directa de su etapa anterior. La primera pel¨ªcula que hacen juntos, La ciudad no es para m¨ª (1966), adaptaci¨®n de una famosa obra teatral con un tono populachero, interpretada por Paco Mart¨ªnez Soria, constituye uno de los grandes ¨¦xitos del cine espa?ol. A ¨¦sta siguen Los chicos del preu ( 1967), Las secreiarias (1968), etc¨¦tera.

Posteriormente, para diferentes productores, y a un ritmo vertiginoso, que le lleva a hacer siete pel¨ªculas en 1972, hace un buen n¨²mero de esas comedias er¨®ticas caracter¨ªsticas de la primera mitad de los a?os setenta. Destacan Vente a Alemania, Pepe (1970) y El chulo (1973), por sus invers¨ªmiles planteamientos. La obra de Lazaga, y especialmente esta parte, ha sido analizada por Alvaro del Amo en su anieno libro Comedia cinematogr¨¢fica espa?ola (Edicusa, 1975).

Lazaga era un h¨¢bil artesano que repart¨ªa su esfuerzo entre demasiadas pel¨ªculas y no cuidaba en absolute, la calidad de sus guiones. Consigui¨® salvar todas las modas del cine espa?ol y hacer ¨²nicamente comedias, de forma que las diferencias que hay entre sus primeras colaboraciones con Dibildos y la ¨²ltima, Vota a Gundisalvo (1977), son m¨ªnimas y vienen dadas por los cambios estructurales del pa¨ªs. En otras condiciones pol¨ªticas y en una industria m¨¢s segura que la nuestra, Lazaga tal vez habr¨ªa logrado ser un importante director comercial; aqu¨ª s¨®lo ha sido un prol¨ªfico artesano, de cuya producci¨®n la cr¨ªtica siempre ha sabrado Trampa para Catalina (1961), tal vez la m¨¢s representativa de sus comedias.