La renovada presi¨®n norteamericana inquieta y divide a la Comunidad Econ¨®mica Europea

Enfrentados con una grave crisis comunitaria y divididos por querellas internas, los nueve pa¨ªses de la Comunidad Econ¨®mica Europea (CEE) se sienten preocupados y se muestran reacios ante las presiones de EE UU para que Europa se una a las represalias norteamericanas contra Ir¨¢n. El aparente fracaso de su gesti¨®n conjunta ante el presidente Banisadr -¨¦ste no les dio ninguna garant¨ªa sobre una r¨¢pida liberaci¨®n de los rehenes norteamericanos- no les ha hecho perder la serenidad, y estudian ahora la respuesta a las declaraciones del presidente Carter, a las que tanto medios estadounidenses como comunitarios niegan el car¨¢cter de ultim¨¢tum.El canciller de la Rep¨²blica Federal de Alemania, Helmut Schmidt, ha criticado a Estados Unidos v a la Uni¨®n Sovi¨¦tica por carecer de ?una estrategia capaz de evitar una nueva guerra? y ha comparado la actual crisis internacional con la que precedi¨® a la primera conflagraci¨®n mundial, informa Julio Sierra desde Bonn.

Respecto a las presiones norteamericanas sobre sus aliados, sin cuyo concurso las medidas norteamericanas contra la URSS e Ir¨¢n ser¨ªan inefectivas, el canciller declar¨® el domingo, en un mitin electoral, que ?algunos deseos del presidente Carter pueden ser correspondidos por los aliados europeos, pero otros s¨®lo en muy limitada medida?. El propio Schmidt calific¨® como ?inexactas? las atribuciones de Carter sobre ?absentismo alem¨¢n? a la hora de la solidaridad efectiva con Estados Unidos.

?Hemos desaconsejado las acciones militares?, afirm¨® Schmidt, ?aunque tambi¨¦n hemos mostrado nuestra disposici¨®n a participar en sanciones econ¨®micas siempre y cuando se decidan de com¨²n acuerdo entre todos los aliados europeos?.

Mientras los socialdem¨®cratas y liberales, en el poder, insisten en los riesgos del camino elegido por la Casa Blanca, la oposici¨®n cristianodem¨®crata exige del Gobierno un embargo econ¨®mico contra Ir¨¢n, llegando incluso a hablar de ?presiones militares? para liberar a los rehenes. Alemania Federal, cabe recordar, es el primer interlocutor comercial de Ir¨¢n.

En todo caso, el ministro alem¨¢n de Asuntos Exteriores, Hans Dietrich Genscher, ha dejado claro que Jimmy Carter no hab¨ªa fijado ninguna fecha tope a sus aliados para que adopten sanciones contra Ir¨¢n. El jefe de la diplomacia germanooccidental descart¨® tambi¨¦n, en el curso de una entrevista televisada, la ruptura de relaciones diplom¨¢ticas entre Bonn y Teher¨¢n.

Londres, reticente

Gran Breta?a, el principal aliado de Estados Unidos, no est¨¢ en principio dispuesta a una escalada de acciones diplom¨¢ticas y econ¨®micas contra Ir¨¢n, y no tiene planeado ning¨²n programa de sanciones comerciales tal como pide el presidente Carter. Sin embargo, la primera ministra brit¨¢nica, Margaret Thatcher, expuso ayer, ante el Parlamento, su criterio de que el Mercado Com¨²n deber¨ªa llegar a una decisi¨®n sobre la acci¨®n a tomar para el pr¨®ximo lunes.Una opini¨®n empliamente compartida es que un bloqueo total de Occidente a Ir¨¢n empujar¨ªa a este pa¨ªs a buscar ayuda en el bloque sovi¨¦tico, hasta el punto de obligarle a depender de ¨¦l m¨¢s de lo que ¨¦l mismo desea.

Holanda, a favor

A falta de reacciones oficiales en Francia e Italia, el primer ministro holand¨¦s., Andrea van Agt, pidi¨® ayer a los pa¨ªses de la OTAN que respalden las medidas econ¨®micas de castigo decididas por el presidente Carter contra Ir¨¢n. La falta de entusiasmo de los europeos por las sanciones econ¨®micas, sin embargo, parece menos fundamentada con los ¨²ltimos acontecimientos Y se aprecian ya los s¨ªntomas de una modificaci¨®n de actitud, que podr¨ªa plasmarse de forma concreta durante la pr¨®xima reuni¨®n de jefes de Estado y Gobierno de la CEE, los d¨ªas 27 y 28 de abril en Luxemburgo.El procedimiento es largo, como resulta habitual en las decisiones comunitarias, y subsisten todav¨ªa muchas disensiones entre los pa¨ªses miembros, cuyos Gobiernos llamaron a consulta a sus embajadores en Teher¨¢n para recibir informaci¨®n directa.

En funci¨®n de sus respuestas, inform¨® ayer en Bruselas un portavoz de la CEE, se iniciar¨¢n inmediatamente reuniones entre los nueve para reexaminar el ?dossier iran¨ª?.

Si no se descarta en medios comunitarios que se puedan adoptar algunas medidas de restricciones econ¨®micas, sin llegar a la aplicaci¨®n pedida por Washington de la resoluci¨®n vetada por la URSS en las Naciones Unidas, se considera imposible ahora mismo una ruptura de las relaciones diplom¨¢ticas.