Choque diplom¨¢tico entre Francia e Inglaterra sobre su condominio en Nuevas H¨¦bridas

El llamado condominio anglofranc¨¦s sobre el archipi¨¦lago de Nuevas H¨¦bridas se parece m¨¢s a un parto de los montes que a una administraci¨®n conjunta de los dos pa¨ªses sobre el lejano territorio de los mares del Sur.Descrito en la Prensa de Londres como ?el m¨¢s claro ejemplo de la falta de entendimiento? entre Francia e Inglaterra de los ¨²ltimos 74 a?os, la sorprendente protesta francesa a la llegada de los marines brit¨¢nicos para poner fin a la secesi¨®n de la isla de Esp¨ªritu Santo no ha hecho sino poner de manifiesto una vez m¨¢s esa falta de entendimiento y recelo mutuos entre los dos pa¨ªses.

La pasada semana, los residentes generales franc¨¦s y brit¨¢nico recomendaron conjuntamente el env¨ªo de fuerzas a Port Vila, capital del archipi¨¦lago, despu¨¦s de una nueva rebeli¨®n en la isla meridional de Tana, que cost¨® la vida a un parlamentario franc¨®fono de la oposici¨®n. Los franceses enviaron un destacamento de polic¨ªa antidisturbios desde la cercana colonia de Nueva Caledonia.

Los ingleses, que no tienen colonias cercanas, anunciaron el env¨ªo de 200 marines procedentes de Inglaterra. Pero antes de la llegada de los marines ingleses, Francia decidi¨® unilateralmente la retirada de sus gendarmes, y ayer sorprendi¨® al Gobierno brit¨¢nico con una declaraci¨®n del residente franc¨¦s, aprobada por Par¨ªs, en el sentido de que cualquier despliegue de las fuerzas brit¨¢nicas sin. la aprobaci¨®n francesa ser¨ªa considerada como una ruptura del protocolo de 1914, que estableci¨® el marco del condominio anglofranc¨¦s. La declaraci¨®n fue acompa?ada de una nota de protesta enviada por el residente galo, Jacques Robert, a su colega brit¨¢nico, Andrew Stuart.

La nota francesa ha causado sorpresa en Londres, donde el ministro de Estado del Foreign. Office, Peter Blaker, se ha mostrado .?perplejo? por la reacci¨®n de Par¨ªs, despu¨¦s del acuerdo de la pasada semana.

Entre tanto, los 200 marines se encuentran estacionados en una escuela de segunda ense?anza, a la espera de que los pol¨ªticos decidan para qu¨¦ van a ser utilizados. Su llegada al aeropuerto de Port Vila en cuatro gigantescos VO-10, seguidos por ocho H¨¦rcules con la necesaria impedimenta, caus¨® sensaci¨®n en la isla, que no hab¨ªa presenciado nada semejante desde la llegada de los americanos en la segunda guerra mundial.

Una sugerencia sobre su posible utilizaci¨®n ha sido ofrecida por el primer ministro, reverendo Walter Lini, quien ha manifestado que podr¨ªan ser usados en algunos ?trabajos c¨ªvicos?, como la construcci¨®n de una nueva carretera de la costa en Port Vila.