"Es la culminaci¨®n de una vida dedicada a un objetivo"

?Ya no tengo edad para sentir escalofr¨ªos, aunque reconozco que esta elecci¨®n es la culminaci¨®n de una vida dedicada a un objetivo?, dijo Juan Antonio Samaranch, ayer tarde en su habitaci¨®n del hotel Mosc¨², minutos despu¨¦s de abandonar la Casa de los Sindicatos, en donde hab¨ªa sido elegido presidente del COI. En el momento del recuento de votos, Samaranch no volvi¨® la espalda ni una sola vez para ver su marcha. Cuando finaliz¨® el escrutinio pens¨®: ?Los espa?oles, cuando somos constantes, llegamos a la meta?.

Juan Antonio Samaranch estaba en su habitaci¨®n atendiendo llamadas de cuantos deseaban felicitarle. En su primera comunicaci¨®n telef¨®nica con Espa?a, estableci¨® contacto con Joaqu¨ªn Puig de la Bella Casa, subsecretario de Asuntos Exteriores. Samaranch desea continuar como embajador en Mosc¨² hasta noviembre.?Establecer¨¦ mi oficina, como es natural, en Lausana y tendr¨¦ tambi¨¦n un peque?o despacho en Madrid?, pero deseo estar en Mosc¨² hasta noviembre por una serie de razones especiales?.

Del nuevo presidente del COI se espera una pol¨ªtica innovadora. Avery Brundage fue un conservador a ultranza, y lord Killanin, ha sido un hombre modificador, pero no demasiado comprometido con el inevitable futuro. Samaranch, sobre el porvenir del COI y de los Juegos Ol¨ªmpicos, tiene ya en mente algunas ideas reformistas. ?Tengo mi personalidad y, a los sesenta a?os, no voy a cambiar. No soy individualista. Me gusta trabajar en equipo para compartir trabajo y honores. No puedo avanzar mi programa, porque deseo discutirlo con mis compa?eros de la comisi¨®n ejecutiva. Todo el mundo me pregunta sobre la famosa regla veintis¨¦is; pero, insisto, no quiero avanzar nada. No he tomado posesi¨®n y, por tanto, como he dicho en la conferencia de prensa, el presidente es todav¨ªa lord Killanin y yo no puedo comenzar a hacer mi pol¨ªtica. Tengo algunas cosas estudiadas, pero tampoco en profundidad. Es l¨®gico, pues, que medite?.

El nuevo presidente del COI, a pesar de los m¨²ltiples problemas internacionales, es optimista de cara al futuro. ? El objetivo b¨¢sico debe ser intentar dar al movimiento ol¨ªmpico una altura m¨¢s consdierable que la que tiene ahora. Mi ilusi¨®n ser¨ªa dejarlo m¨¢s arriba?.

El futuro de los Juegos Ol¨ªmpicos est¨¢ seriamente comprometido. Respecto a la posibilidad de instituir Olympia como sede perpetua, aunque Samararich no aventura una respuesta concreta sobre el tema, lo ve dif¨ªcil. ?Hay una comisi¨®n que est¨¢ estudiando la propuesta, pero no parece probable que se le d¨¦ el visto bueno?.

Espa?a tambi¨¦n ha sonado alguna vez con la celebraci¨®n de unos Juegos. Con Samaranch en la presidencia es l¨®gico que se vuelva a pensar en esa posibilidad.

?Para m¨ª ser¨ªa una gran ilusi¨®n inaugurar dentro de ocho a?os unos Juegos en Espa?a, pero ese es un problema de Estado y no parece ser ¨¦ste el momento m¨¢s adecuado para plantearlo. Unos Juegos requieren unas grandes inversiones, y por otra parte hace falta un nivel deportivo muy superior al que tenemos?.

Los Juegos Ol¨ªmpicos, en opini¨®n de muchos expertos, est¨¢n heridos de muerte. El nuevo presidente tambi¨¦n opina de esta cuesti¨®n.

?Yo dir¨ªa que es comprometido opinar sobre esto. En estos momentos en que se habla de tan grave crisis ha sido firmado el contrato de transmisi¨®n de los juegos de invierno de Sarajevo, con la cadena nortamericana ABC, por un total de 6.000 millones de pesetas. No se ven tan mal las, cosas?.

Estados Unidos

La relaci¨®n de Saramaranch con el Comit¨¦ Ol¨ªmpico estadounidense es muy buena con el presidente y vicepresidente, aunque no, han venido a Mosc¨². El problema con Estados Unidos en estos momentos sigue siendo el uso de la bandera en la sesi¨®n de clausura. Seg¨²n Samaranch, todav¨ªa no se ha adoptado una postura, definitiva.

Sobre una posible visita al presidente Carter para hablar del futuro de los Juegos no afirma nada, porque insiste en que no quiere comenzar a actuar. ?Pero quieto no estar¨¦?, dice.

Samaranch opina que el gigantismo de los Juegos es inevitable, y que la incorporaci¨®n de nuevos depqytes se ir¨¢ haciendo paulatinamente. ?Soy partidario de las incorporaciones, siempre y cuando no excedan las posibilidades de organizaci¨®n de un pa¨ªs. No se puede ser est¨¢tico. En este momento hay una comisi¨®n formada para estudiar la incorporaci¨®n del tenis de mesa y su informe es favorable. Respecto al hockey sobre patines, vieja aspiraci¨®n espa?ola, debo decir que no han desaparecido las dificultades. Pertenece a una federaci¨®n que, cuenta con tres disciplinas diferentes y hasta que no intente irlas metiendo de una en una seguir¨¢ fracasando. No se pueden imponer las tres a la vez?.

Espa?a ha planteado a la comisi¨®n ejecutiva del COI la posibilidad de incorporar a la comisi¨®n tripartita de la que forman parte COI, comit¨¦s, ol¨ªmpicos nacionales y federaciones internacionales, a los organismos gubernamentales que controlan el deporte. Para Samaranch esta propuesta espa?ola es una idea a considerar.

El nuevo presidente no cree que el boicoteo le haya favorecido para la elecci¨®n. ?Creo que los hombres del COI est¨¢n por encima de estas cuestiones?. Sin embargo, pese a la opini¨®n del nuevo presidente, lo cierto es que en la votaci¨®n han obtenido mayor n¨²mero de votos los dos aspirantes cuyos pa¨ªses no han sido partidarios del boicoteo.