Nuevas H¨¦bridas se constituye en Rep¨²blica de Vanuat¨²
Setenta y cuatro a?os de condominio franco-brit¨¢nico sobre el archipi¨¦lago de Nuevas H¨¦bridas terminan a las cero horas de hoy con la proclamaci¨®n de la independencia de las paradis¨ªacas islas el Pac¨ªfico Sur, con el nombre de Rep¨²blica de Vanuat¨².
Sin embargo, el futuro de la nueva naci¨®n dista mucho de ser paradisiaco porque, seg¨²n informaciones de ¨²ltima hora llegadas a la capital brit¨¢nica el l¨ªder secesionista de la mayor y m¨¢s rica de las islas, Jimmy Stevens, de Esp¨ªritu Santo, sigue neg¨¢ndose a aceptar la autoridad del Gobierno central, a pesar de la presencia militar franco-brit¨¢nica en su territorio.La situaci¨®n es extremadamente embarazosa para las dos potencias coloniales, que la pasada semana enviaron una fuerza conjunta de doscientos soldados, marines brit¨¢nicos y paracaidistas franceses, en un intento de terminar la rebeli¨®n de Stevens. Los soldados aterrizaron en Luganville, capital de Esp¨ªritu Santo, sin disparar un solo tiro, pero Stevens y su Gobierno rebelde se retiraron a la jungla, donde cincuenta colonos franceses y un primitivo ej¨¦rcito de ind¨ªgenas armados de arcos, lanzas flechas est¨¢n dispuestos a resistir cualquier intento de ser colocados baj¨® la autoridad del Gobierno central en Port Vila.
Entre tanto, los preparativos para la independencia siguen en la capital del archipi¨¦lago, donde se ha registrado la llegada de los representantes de los Gobiernos de Par¨ªs y Londres, as¨ª como del duque de Gloucester, que representar¨¢ a la reina Isabel.
Las potencias coloniales han hecho saber al reverendo Walter Lini, jefe del Gobierno angl¨®fono de Port Vila, que est¨¢n dispuestas a mantener las tropas en Esp¨ªritu Santo el tiempo que el Gobierno central estime conveniente. Pero el reverendo Lini, desencantado por el aparente fracaso anglo-franc¨¦s de convencer a Stevens de que acepte su autoridad, tiene otros planes para los rebeldes.
Aprovechando la llegada de trescientos soldados de la vecina Pap¨²a-Nueva Guinea para participar en los festejos independentistas, Lini ha manifestado que tiene intenci¨®n de enviar parte de estas tropas a Esp¨ªritu Santo, junto con polic¨ªas de Port Vila, para restablecer la autoridad del Gobierno central, medida peligrosa que las dos potencias coloniales est¨¢n tratando de evitar a cualquier coste.
Entre tanto, Par¨ªs ha destituido a su presidente general en el territorio, Jean-Jacques Robert, aparentemente por su celo en asegurar a los colonos franceses de Esp¨ªritu Santo de que Francia nunca les abandonar¨ªa, lo que ha provocado un endurecimiento en la postura de estos colonos.
La esperanza de la diplomacia anglo-francesa -y Londres est¨¢ representada por el ministro de Estado para el Foreign Office, Peter Blaker-, es que al final Stevens desista de su actitud secesionista, a cambio de una amplia autonom¨ªa para Esp¨ªritu Santo. Pero, hasta el momento, los deseos de Par¨ªs y Londres no se corresponden con la realidad, y esa realidad est¨¢ reflejada en un comunicado de los rebeldes de ayer por la ma?ana, en el que una vez m¨¢s rechazaban todo compromiso y reiteraban su amenaza de tomar las armas contra el Gobierno central de Walter Lini.
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