Los ¨²ltimos huelguistas polacos, los mineros del carb¨®n de Silesia, llegan a un acuerdo con el Gobierno

La normalidad laboral reina de nuevo en Polonia, tras dos meses de paros, despu¨¦s del acuerdo alcanzado anoche entre los mineros que se manten¨ªan en huelga en la alta Silesia, coraz¨®n industrial del pa¨ªs, y el Gobierno. Los huelguistas se reincorporar¨¢n al trabajo ma?ana, jueves, despu¨¦s de conseguir, como sus compa?eros del litoral b¨¢ltico, el derecho de crear sindicatos libres y el de huelga. Los mineros han logrado tambi¨¦n la semana laboral de cinco d¨ªas y la reducci¨®n de la edad de retiro -para los que trabajan en los pozos- de 55 a 50 a?os. Los paros comenzaron hace unos d¨ªas en algunas minas pr¨®ximas a la frontera checoslovaca, en el suroeste de Katowice, en solidaridad con las huelgas del B¨¢ltico.

Noticias no oficiales estiman el n¨²mero de huelguistas en unos 30.000, lo que representar¨ªa el 10% del total de mineros en la cuenca carbon¨ªfera de Silesia.A las reivindicaciones id¨¦nticas a los comit¨¦s de huelga del B¨¢ltico, al Comit¨¦ de Huelga Interempresas (MKS) de Silesia, a?adi¨® peticiones concretas sobre seguridad en el trabajo. Esta reivindicaci¨®n encontr¨® en la noche del pasado lunes un apoyo considerable, tras la muerte de ocho mineros en un derrumbamiento.

La negociaci¨®n con el MKS de Jastrzebie, ciudad cercana a Katowice, donde est¨¢ reunido el presidium del comit¨¦ de huelga, fue concluida por el viceprimer ministro, Aleksander Kopec. Con ello, el Gobierno se somete a las peticiones de los huelguistas, quienes exigieron que su interlocutor gubernamental deb¨ªa tener la misma categor¨ªa que aquellos que sellaron la reforma sindical en Szczecin y Gdansk, los tambi¨¦n viceprimeros ministros, Barcikowski y Jagielski, respectivamente.

La sustituci¨®n, ayer, del ministro de Minas, WIodzimierz Lejczak, por Kopec no obedece al endurecimiento de la postura del primero, como ocurri¨® en Gdansk tres d¨ªas despu¨¦s de comenzada la huelga, cuando Tadeusz Pyka fue sustituido por Jagielski.

La llegada de Kopec a estas negociaciones se debe, tanto a la ya mencionada presi¨®n de los mineros del MKS, como a la necesidad del grupo ?liberal? del partido comunista, POUP, de asegurarse el papel de ¨²nico mediador v¨¢lido con los huelguistas. Mantener la iniciativa que consigui¨® el pasado 24 de agosto en el reajuste pol¨ªtico.

Medidas aperturistas

De este modo, la promesa formulada por Jagielski al l¨ªder sindical del B¨¢ltico Lech Walesa, al final de las conversaciones en los astilleros Lenin de Gdansk, sobre la inmediata puesta en vigor de algunas medidas liberalizadoras en los medios de comunicaci¨®n, y exigida por los huelguistas, se concret¨® ayer en el editorial del ¨®rgano oficial del POUP, Tribuna Ludu, firmado por su comentarista especial y miembro del comit¨¦ central, Franciszek Lewicki.

El propio Walesa record¨® el asunto horas antes de la salida del peri¨®dico, en el primer mitin del MKS de Gdansk, constituido como comisi¨®n obrera, al hablar ante unos 3.000 nuevos afiliados. ?En nuestras manos est¨¢ conseguir todas las cosas?, dijo, ?ahora que tenemos sindicatos libres, y entre ellas est¨¢n las concesiones en relaci¨®n con la censura?.

El editorial de Tribuna Ludu, bajo el t¨ªtulo ?Autogesti¨®n socialista?, subraya que la realidad ha demostrado que tanto el partido comunista como las organizaciones autogestionarias tienen una importancia igual ?en la edificaci¨®n de la democracia socialista?.

Pero lo m¨¢s sorprendente del editorial ha sido la autocr¨ªtica del POUP y el ataque directo contra el tecnocratismo. ?Es err¨®neo considerar?, escribi¨® el articulista, que el aparato de gobierno, por el mero hecho de ser socialista, lo har¨¢ bien. Entre los grandes errores cometidos est¨¢ el considerar las f¨®rmulas democr¨¢ticas de gobierno como inservibles por su lentitud?.

Lo que hasta hace un mes pareciera impensable ver reflejado en las p¨¢ginas de Tribuna Ludu fue escrito ayer por Lewicki, quien otorg¨® un papel al POUP y a las organizaciones au togestion arias ?en su labor de control de las actuaciones gubernamentales ?, lo que significa una desestimaci¨®n de las consideraciones generales del VIII Congreso del POUP, el pasado mes de febrero, en su pretensi¨®n de someter la funci¨®n gubernamental al exclusivo control del aparato comunista, justific¨¢ndolo en base a una identificaci¨®n del pueblo con las tareas del partido.

AL pesar de todo ello, uno de los portavoces del Comit¨¦ de Autodefensa Obrera (KOR), Jack Kuron, declar¨® en una conferencia de Prensa, pocas horas despu¨¦s de ser liberado el lunes en Varsovia, que los dirigentes har¨ªan todo lo posible para conservar su poder.