"El quinto jinete"

Con estupefacci¨®n leemos en su peri¨®dico, por el que sentimos admiraci¨®n y estima, un art¨ªculo sobre nuestro libro El quinto jinete (EL PA?S, 15-6-1980).Si a Juan Tebar no le ha gustado nuestro libro, hasta el punto de permitirse calificarlo de ?vulgar e ininteresante?, est¨¢ en su derecho. Todo lo m¨¢s podr¨ªa se?alarse es que es probablemente la ¨²nica persona, entre millones de lectores de El quinto jinete, en tener esta opini¨®n. Y como su nombre no brilla, que nosotros sepamos, en el firmamento de las letras espa?olas, su opini¨®n no es, por su car¨¢cter excesivo, completamente indiferente.

Pero lo que, en cambio, nos escandaliza es que un peri¨®dico como EL PA?S pueda publicar lucubraciones tan absurdas sobre la supuesta fabricaci¨®n de un best-seller. Que se pueda escribir, en efecto, que un libro corno El quinto jinete (o cualquier otro libro) representa el producto de una computadora es un afirmaci¨®n tan deshonesta que roza la difamaci¨®n.

Para convencerle, le invitamos a venir a consultar con nosotros los casi ochocientos kilos de documentaci¨®n que hemos reunido para escribir El quinto jinete, a escuchar los centenares de horas de entrevistas, a ver los millares de fotograf¨ªas que hemos juntado. Adem¨¢s le invitar¨ªamos a estudiar las casi 20.000 p¨¢ginas del manuscrito original, cuyo fruto es la versi¨®n final de El quinto jinete. Podr¨¢ constatar entonces por s¨ª mismo que este gigantesco trabajo de cuatro a?os no tiene realmente nada que ver con las afirmaciones gratuitas, absurdas y difamatorias de su colaborador./