Washington consulta con sus aliados la creaci¨®n de una fuerza naval para el golfo P¨¦rsico

El secretario de Estado norteamericano, Edmund Muskie, confirm¨® anoche que Washington estaba efectuando consultas con sus aliados sobre la posibilidad de crear una fuerza naval internacional, que ser¨ªa enviada al golfo P¨¦rsico en caso de que el estrecho de Ormuz fuese bloqueado, informa desde Nueva York la agencia AFP.

Subray¨®, sin embargo, Muskie que ninguna decisi¨®n hab¨ªa sido adoptada todav¨ªa al respecto, ya que las restricciones a la libertad de navegaci¨®n en el golfo P¨¦rsico ?no son suficientes en la actualidad para provocar una acci¨®n militar? por parte de los pa¨ªses occidentales.El secretario de Estado norteamericano, que ayer por la tarde mantuvo una entrevista sobre el conflicto entre Ir¨¢n e Irak ton el ministro saud¨ª de Asuntos Exteriores, subray¨® que Estados Unidos, sus aliados europeos, la Uni¨®n Sovi¨¦tica y los pa¨ªses de la regi¨®n del golfo estaban de acuerdo sobre la importancia capital del estrecho de Ormuz.

Aunque se ignora qu¨¦ pa¨ªses estar¨ªan dispuestos a poner parte de sus nav¨ªos bajo un mando com¨²n, las primeras especulaciones consideran a Estados Unidos, Gran Breta?a y Francia como los m¨¢s probables.

Los ministros de Asuntos Exteriores de la CEE han emitido un comunicado destacando ?la capital importancia que tiene la libertad de navegaci¨®n por-el golfo P¨¦rsico, que es necesario preservar?.

La Organizaci¨®n del Tratado del Atl¨¢ntico Norte (OTAN) no teme tanto un bloqueo intencionado del estrecho de Ormuz como un bloqueo accidental, que no ser¨ªa atribuible formalmente a ninguna de las partes implicadas en el conflicto ?rano-iraqu¨ª, pero que ser¨ªa igualmente peligroso para la econom¨ªa occidental, seg¨²n informa desde Bruselas, nuestra corresponsal, .

Los expertos atiantistas estiman que los pa¨ªses productores de petr¨®leo que utilizan esta v¨ªa para sus exportaciones de crudos ejercen toda la presi¨®n a su alcance para asegurarse el normal funcionamiento del estrecho de Ormuz, y que tanto Ir¨¢n como Irak son conscientes de la ?gravedad l¨ªmite? de un eventual bloqueo.

El mayor riesgo parece estribar en un accidente que impidiera, al menos parcialmente, el libre paso por esta important¨ªsima v¨ªa de agua. Bastar¨ªa con que dos grandes barcos se medio hundieran para que los enormes petroleros que cargan su mercanc¨ªa en los puertos de Arabla Saud¨ª o Kuwait sufrieran gravemente las consecuencias.

Los expertos militares de la Alianza Atl¨¢ntica examinan d¨ªa a d¨ªa la evoluci¨®n de la guerra irano-iraqu¨ª, y mantienen informados a los Gobiernos de los trece pa¨ªses que forman parte del mando militar integrado.

En medios pol¨ªticos pr¨®ximos a la OTAN se afirma que la crisis irano-iraqu¨ª tendr¨¢, al menos desde su punto de vista, un efecto positivo: poner en evidencia ante los pa¨ªses europeos su debilidad y su vital dependencia de Estados Unidos. S¨®lo Norteam¨¦rica est¨¢ en condiciones de asegurar a Europa occidental el acceso a las fuentes de aprovisionamiento energ¨¦tico en Oriente Pr¨®ximo, pero para ello, afirman fuentes pr¨®ximas a Washington, debe reforzar su presencia en el oc¨¦ano Indico y en el golfo P¨¦rsico.

Los diplom¨¢ticos y militares norteamericanos parecen estar dispuestos a aprovechar el p¨¢nico que los conflictos en Oriente Pr¨®ximo causan en Europa para asegurarse, en diciembre, el compromiso aliado de poner en marcha inmediatamente el plan de refuerzo de las maquinarias militares europeas.