Total acuerdo de EE UU y la URSS sobre no intervenci¨®n en la guerra

Al t¨¦rmino de la entrevista, ayer, entre el secretario de Estado norteamericano, Edmund Muskie, con su hom¨®logo sovi¨¦tico, Andrei Gromiko, en Nueva York, las dos superpotencias concretaron su total acuerdo de no intervenir en favor de ninguna de las partes envueltas en la guerra irano-iraqu¨ª. Entre tanto, este conflicto sigue dominando la escena de la 35? Asamblea General de las Naciones Unidas (ONU), cuyo secretario general decidi¨®, por fin, convocar una reuni¨®n del Consejo de Seguridad.

El secretario de Estado norteamericano manifest¨® que tanto Washington como Mosc¨² consideran ?poco probable? una escalada del conflicto. Subray¨® en el curso de una conferencia de Prensa que fundaba esta opini¨®n en su interpretaci¨®n de la posici¨®n de la postura sovi¨¦tica, tal como le hab¨ªa sido expuesta por Gromiko en la entrevista mantenida.?Los sovi¨¦ticos y nosotros sabemos que nadie puede salir ganando en este conflicto?, declar¨® Muskie, pero precis¨® que ?no nos vemos apremiados ambos a adoptar solos la iniciativa de buscar el fin de las hostilidades.

Consider¨® que la posici¨®n de Estados Unidos es ?muy delicada?, y que una iniciativa norteamericana ?no ser¨ªa ¨²til? en las circunstancias actuales.

No excluy¨® la posibilidad de una eventual cooperaci¨®n entre Washington y Mosc¨² parra tratar de resolver la crisis. ?Especulaciones en este sentido ser¨ªan prematuras, pero nunca se sabe, pues a veces dos partes pueden, intercambiando sus puntos de vista, acabar por adoptar posiciones paralelas?, dijo Muskie.

El secretario de Estado afirm¨® que Estados Unidos desea que el Consejo de Seguridad tome la iniciativa de intentar obtener un acuerdo de alto el fuego entre los beligerantes. ?No creo que los sovi¨¦ticos se opongan a ello?, concluy¨®.

Anoche, tras mantener consultas con los miembros del Consejo de Seguridad, el secretario general de la ONU, Kurt Waldheini, pidi¨® oficialmente la convocatoria del Consejo de Seguridad para examinar con car¨¢cter de urgencia el conflicto irano-iraqu¨ª, que constituye una ?amenaza para la paz y la seguridad internacionales?.

M¨¢s realista que la reuni¨®n del Consejo de Seguridad, que como en otras tantas guerras peligra de perderse en declaraciones diplom¨¢ticas que ninguno de los bandos interesados respeta, los pa¨ªses del grupo occidental centran su preocupaci¨®n por salvaguardar el libre paso por el estrecho de Ormuz, por donde circula el 60% del petr¨®leo que consumen los pa¨ªses occidentales.

En Washington, el portavoz del Departamento de Estado confirm¨® el embargo a Irak de la venta de cuatro motores a reacci¨®n que deb¨ªan equipar otras cuatro fragatas actualmente fabricadas en Italia por encargo del Gobierno iraqu¨ª. Estados Unidos se propone mantener un estricto embargo de todo material militar a cualquiera de las dos partes interesadas. Con Ir¨¢n, el embargo es ya electivo desde finales del pasado a?o, cuando Carter decret¨® un boicoteo total a Ir¨¢n -excepto en venta de alimentos y medicinas- para forzar la liberaci¨®n de los 52 rehenes norteamericanos, todav¨ªa detenidos en Ir¨¢n.