Taurina Hispalense ha incumplido contrato
Parecen confirmarse varios incumplimientos de contrato de Taurina Hispalense, sociedad arrendataria de Las Ventas, a la vista de la documentaci¨®n que ha podido ser consultada por EL PA?S. Estos incumplimientos se refieren principalmente a deudas a la Seguridad Social, elevaci¨®n de precios de localidades por encima del l¨ªmite del 35% autorizado, vulneraci¨®n del reglamento taurino, falta de regularizaci¨®n del balance contable y ampliaci¨®n del capital social, etc¨¦tera.
Todos estos supuestos est¨¢n contemplados en el contrato de arrendamiento de la plaza y reglamento de r¨¦gimen interno en tanto que en la estipulaci¨®n veinte de aqu¨¦l se dice claramente que el incumplimiento de cualquiera de las obligaciones que incumben a la empresa adjudicataria dar¨¢ lugar a la rescisi¨®n del contrato.En la Diputaci¨®n de Madrid hay seria inquietud por esta situaci¨®n, que nos ha sido manifestada tanto por el presidente del Consejo Taurino, el diputado comunista Joaqu¨ªn Tejeiro como por el director de Asuntos Taurinos de la Corporaci¨®n, Agust¨ªn Mara?¨®n. Ambos insisten en que debe llevarse el contrato de arrendamiento y el reglamento de r¨¦gimen interno a sus ¨²ltimas consecuencias y, si es necesario, llegar a la rescisi¨®n, para abrir una nueva etapa que salvaguarde los derechos de la afici¨®n de Madrid.
Hay en el fondo una actitud de agravio comparativo de la que es responsable la propia Diputaci¨®n, pues las empresas que concurrieron en 1978 a la subasta de Las Ventas se supone aquilataron sus ofertas en relaci¨®n con los distintos compromisos que les acarrear¨ªa la adjudicaci¨®n, y quiz¨¢ aqu¨¦llas habr¨ªan sido muy distintas de saber que el arrendador incurrir¨ªa, de hecho, en permisividad y dejaci¨®n de sus derechos, como parece que ocurri¨® al finalizar el primer per¨ªodo de gesti¨®n de Diodoro Canorea -inicial empresario de la plaza- y efectuar la cesi¨®n de titularidad a Taurina Hispalense.
Porque la Diputaci¨®n ya sab¨ªa entonces de forma fehaciente que la mencionada sociedad era la que hab¨ªa respaldado a Canorea y, teniendo un capital de veinticinco millones de pesetas, su balance al 31 de diciembre de 1979 determinaba una p¨¦rdida de 110.267.809 pesetas, sin que los socios reembolsaran las cantidades correspondientes, ni efectuaran ampliaci¨®n de capital, ni declararan suspensi¨®n de pagos o quiebra.
La entrada en la sociedad de Jos¨¦ Luis Mart¨ªn Berrocal posibilit¨® la obtenci¨®n de avales para la continuaci¨®n de la empresa, y la presentaci¨®n de los mismos, a despecho de incumplimientos que entonces ya parec¨ªan evidentes y de la absoluta descapitalizaci¨®n de la sociedad, basta a la Diputaci¨®n para otorgar su confianza a Taurina Hispalense, en cuyo nombre firma Berrocal el reglamento de r¨¦gimen interior y se inicia una de las temporadas m¨¢s incoherentes que se recuerdan en Madrid.
Quedan pendientes de la temporada anterior un confuso asunto fiscal, y otros diversos descubiertos, que contin¨²an, entre ellos la seguridad social de algunos empleados, que producen que la Inspecci¨®n de la Seguridad Social de Madrid levante actas de infracci¨®n y de obstrucci¨®n, en julio del presente a?o, por impago de cuotas, con una liquidaci¨®n que asciende a 1.289.966 pesetas. La limitaci¨®n del 35% de la subida del precio de las entradas se rebasa en once tipos de localidades, sin que haya contrapartida de reducci¨®n -ni siquiera de mantenimiento- del precio de ninguna. La autoridad gubernativa propone sanci¨®n y apercibe de inhabilitaci¨®n a Berrocal, por reiteradas vulneraciones del reglamento taurino. Se multiplican las corridas mixtas cuando deb¨ªan celebrarse corridas de toros o novilladas. Hay un pleito en Magistratura por incumplimiento de contrato en el montaje de la ¨®pera Carmen, etc¨¦tera. La Diputaci¨®n ha requerido a Berrocal para que demuestre documentalmente el cumplimiento de importantes estipulaciones del contrato de arrendamiento.
Babelia
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