El Gobierno italiano rechaza tajantemente las propuestas de las Brigadas Rojas

El Gobierno italiano ha optado por la firmeza y rechaza ?los siniestros procedimientos propuestos? por los terroristas que secuestran al magistrado Giovanni d'Urso, declar¨® ayer ante la Comisi¨®n senatorial de Justicia e Interior el ministro italiano de Justicia, Adolfo Sarti.

En su octavo comunicado, las Brigadas Rojas, organizaci¨®n terrorista responsable del secuestro del juez, anunci¨® el domingo la condena a muerte de su reh¨¦n, que, sin embargo, s¨®lo ser¨¢ efectiva si los ?comit¨¦s de lucha? de las c¨¢rceles de m¨¢xima seguridad de Trani y Palmi, donde se encuentran todos los jefes hist¨®ricos de las organizaciones terroristas y los principales intelectuales de extrema izquierda, empezando por el propio Toni Negri, la ratifican.?El Gobierno confirma que hace todo lo que est¨¢ a su alcance para salvar la vida del magistrado D'Urso?, subray¨® Sarti, ?pero tiene el deber de declarar que no existe ninguna posibilidad de aceptar los siniestros procedimientos propuestos por los terroristas?. Concretamente, el Gabinete italiano no permitir¨¢ a los terroristas presos -aproximadamente unos mil- decidir si sus compa?eros en libertad deben o no ejecutar al juez D'Urso.

Las declaraciones del ministro confirman la l¨ªnea de firmeza preconizada por todas las fuerzas pol¨ªticas, excepto los radicales, desde que las Brigadas Rojas entregaron su octavo comunicado al diario II Messagero, de Roma.

Los dos principales partidos pol¨ªticos italianos, el comunista y el democristiano, que, ya en 1978 hicieron frente com¨²n contra cualquier negociaci¨®n con los secuestradores de Aldo Moro, se han vuelto a oponer con la misma firmeza a cualquier actitud complaciente del Gobierno de cara a los terroristas.

Incluso el partido socialista, el m¨¢s propenso hasta hace poco a entablar el di¨¢logo con los terroristas y decidido partidario del cierre de la c¨¢rcel de m¨¢xima seguridad de Asinara (Cerde?a), consider¨® absurdas las peticiones de los brigadistas y reiter¨® su ?apoyo total e incondicional? al Gobierno.

Este endurecimiento, del tercer partido italiano ha inspirado, a los socialdem¨®cratas el siguiente comentario: ?Hasta los ciegos empiezan a ver?, mientras, el partido republicano calificaba la propuesta de los brigadistas de ?chantaje monstruoso que asigna a los detenidos la funci¨®n de jueces?. Por ¨²ltimo, los liberales han pedido al Gobierno una declaraci¨®n ?que exluya ahora y en el futuro cualquier posibilidad de negociaci¨®n directa e indirecta con los terroristas?.

El Movimiento Social Italiano (MSI, neofascista), uno de cuyos dirigentes, Tommaso Capezzera, fue herido de bala ayer, ha anunciado la apertura de una campa?a de recogida de firmas para obtener la convocatoria de un refer¨¦ndum con vistas a establecer la pena de muerte. S¨®lo el peque?o Partido Radical mantiene una postura ligeramente diferente. Su direcci¨®n ha pedido a las Brigadas Rojas que liberen inmediata y unilateralmente a su reh¨¦n. A cambio, los radicales ofrecen todos sus ¨®rganos de informaci¨®n a los reclusos de Trani y Palmi, para que puedan dar a conocer sus opiniones sobre el sistema penitenciario.

La reacci¨®n de la Prensa

Esta actitud contrasta con la de siete grandes diarios, Corriere de lla Sera, Il Tempo, Paese Sera, Il Resto del Carlino, L'Avvenire, Il Giorno e Il Giornale Nuovo, que han decidido no informar sobre las reivindicaciones de los terroristas y no hacerse eco de sus comunicados. El director de Corriere della Sera, el rotativo de mayor difusi¨®n en Italia, justific¨® su decisi¨®n por negarse a convertirse en ?carteros de las Brigadas Rojas?.

Esta decisi¨®n de algunos peri¨®dicos, a la que se sumar¨¢n probablemente otras publicaciones, constituye un segundo rechazo de las exigencias terroristas. Las Brigadas Rojas ped¨ªan, en efecto, tras anunciar que s¨®lo los ?comit¨¦s de lucha? de las c¨¢rceles estaban habilitados para suspender la ejecuci¨®n del magistrado, que las deliberaciones de los presos fueran integramente publicadas en Prensa y televisi¨®n. Despu¨¦s del Gobierno, la Prensa ratifica tambi¨¦n la condena a muerte del juez Giovanni d'Urso, secuestrado por las Brigadas Rojas desde el 12 de septiembre.

La publicaci¨®n por L'Espresso, en Italia, de una entrevista con las Brigadas Rojas y del interrogatorio del juez Giovanni d'Urso, suscita una amplia pol¨¦mica en Francia, informa nuestro corresponsal en Par¨ªs, Feliciano Fidalgo. Los dos periodistas del semanario italiano, encarcelados tras la publicaci¨®n, son defendidos por una mayor¨ªa de los editorialistas. Personalmente, ayer se pronuciaron varios directores de peri¨®dicos parisienses o de provincias. A trav¨¦s de una mi niencuesta sobre su actitud en caso de que hubiesen tenido en sus manos los documentos publica dos por L'Espresso, seis asegura ron que los hubieran publicado ¨ªntegramente, cuatro respondieron no y tres hubiesen aceptado la entrevista, pero no el interroga torio. El conservador Le Figaro, dijo ?no? rotundamente, de igual manera que el diario comunista L'Humanit¨¦. El director del in dependiente Le Monde, Jacques Fauvet, confes¨¦ no saber exacta mente lo que hubiese hecho, pero en cualquier caso, antes de publicar la referida informaci¨®n, hubiese alertado a la polic¨ªa.