4.000 polic¨ªas buscan a Quini
A pesar del importante despliegue policial que se mantiene en Barcelona para rastrear y seguir la posible pista de los secuestradores de Quini -m¨¢s de 4.000 hombres-, ¨¦ste sigue sin aparecer. La polic¨ªa se encuentra a veces desbordada por la enorme cantidad de llamadas y rumores que de continuo se producen. Ayer volvi¨® a repetirse una escena cl¨¢sica estos d¨ªas, con movilizaci¨®n de un buen n¨²mero de funcionarios, ante las sospechas de determinadas personas que aseguraban poseer una pista concreta de Quini. Como dato anecd¨®tico cabe rese?ar que fueron mil los polic¨ªas movilizados por el jefe superior, Enrique Mosquera, en la falsa alarma del martes, cuando Simonssen lleg¨® con una hora de retraso al entrenamiento.Junto a comunicaciones de ciudadanos con un claro esp¨ªritu de colaboraci¨®n -toda Barcelona est¨¢ volcada en intentar ayudar de alguna forma al r¨¢pido y feliz desenlace del caso Quini-, a la sede del club azulgrana, en La Mas¨ªa, han llegado tambi¨¦n numerosas llamadas de bromistas con pistas y situaciones absurdas, as¨ª como otras que mueven a que la polic¨ªa compruebe exhaustivamente casi todas las que se producen.
Como un aut¨¦ntico reguero de p¨®lvora corri¨® a primeras horas de la tarde de ayer el rumor de que Quini hab¨ªa sido liberado cerca de Manresa, seg¨²n se inform¨® a la Guardia Civil de aquella localidad, y que se encontraba dentro de un saco en un coche Seat 131, color calabaza. Tambi¨¦n se procedi¨® a comprobar otra llamada que insist¨ªa en la presencia de tres individuos sospechosos, suramericanos, cerca de Riera de San Sim¨®n, en Can Bruguera. Dos d¨ªas antes se hab¨ªa producido otra llamada an¨®nima, que tambi¨¦n result¨® falsa.
La polic¨ªa s¨ª encontr¨® ayer una DKW que se presupone pudo haber sido en la que se llev¨® a cabo el secuestro del jugador, al tratarse de la misma que se observ¨® el domingo horas antes del secuestro y que pareci¨® sospechosa a una persona, que se apresur¨® a tomar el n¨²mero de matr¨ªcula. Esta, seg¨²n comprob¨® la polic¨ªa despu¨¦s, era falsa y correspond¨ªa a un seiscientos. La DKW apareci¨® en la calle de Llobreg¨®, en el barrio del Carmelo, como consecuencia de ese importante despliegue policial al que antes se alud¨ªa. En el momento de redactar esta informaci¨®n contin¨²a, pues, el comp¨¢s de espera en torno al secuestro de Quini y a las negociaciones para liberarle, contactos que siguen manteni¨¦ndose en un impresionante sigilo oficial. El Gobierno Civil ha pedido incluso moderaci¨®n y colaboraci¨®n a los propios medios informativos. Por el momento, la situaci¨®n podr¨ªa definirse como una batalla psic¨®l¨®gica entre los secuestradores, cuyos deseos son los de cobrar el dinero lo m¨¢s r¨¢pido posible, y la polic¨ªa, aunque los contactos se mantienen a trav¨¦s de la familia en su domicilio, as¨ª como con los m¨¢ximos dirigentes del club azulgrana, N¨²?ez y Gaspart.
A ¨²ltima hora de la tarde se supo que la familia de Quini se entrevist¨® con el gobernador civil, Jos¨¦ Coderch, quien le pidi¨® tranquilidad.
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