Antes de fin de a?o puede ser creado el consorcio de transportes de Madrid

Madrid y Barcelona pueden contar, antes de que termine el a?o, con unos consorcios de transporte que permitan coordinar y planificar los diferentes servicios existentes, lo que conllevar¨¢ una mejor gesti¨®n de los mismos y una serie de ventajas para los usuarios.

La posibilidad de crear estos consorcios Figura ya en el proyecto de ley de Financiaci¨®n del Transporte P¨²blico Colectivo Urbano, que en breve entrar¨¢ en la Comisi¨®n de Transportes del Congreso, y en la que se establecen los mecanismos que podr¨¢n utilizar los ayuntamientos que, como el de Madrid, sufren fuertes d¨¦ficit como consecuencia del transporte urbano.Durante el pasado a?o, quince de las 152 empresas de transporte colectivo de superficie que existen en Espa?a tuvieron un d¨¦ficit total cercano a los 13.000 millones de pesetas, de los que cerca de 3.500 millones correspondieron a la Empresa Municipal de Transportes (EMT). El resto de las empresas, gestionadas por el sector privado, obtuvo un resultado positivo de 439 millones de pesetas.

Las razones de este d¨¦ficit son, seg¨²n un estudio efectuado por la Direcci¨®n General de Infraestructura del Transporte, el exceso de plantilla de las empresas municipales o laborales frente a las privadas, unos salarios superiores en las primeras en un 35%-40% y una menor productividad con respecto a la obtenida por las empresas particulares. En contrapartida, seg¨²n el estudio, las compa?¨ªas municipales ofrecen mayor n¨²mero de veh¨ªculos por habitante y una flota de autobuses m¨¢s moderna.

Las consecuencias de todo ello son que el coste por kil¨®metro asciende a 81 pesetas en las empresas privadas, en tanto que en las, municipales se eleva a 147 pesetas. Para cubrir estos costes, los ayuntamientos necesitar¨ªan poner una tarifa media de 28,36 pesetas frente a las 15,78 pesetas que actualmente se cobran.

?El proyecto de ley recoge la necesidad de que las tarifas sean autosuficientes; sin embargo, las quince empresas que tienen en la actualidad d¨¦ficit no pueden adoptar este sistema en breve plazo, por lo que se les ha dado un instrumento a los ayuntamientos, con el fin de que puedan cubrir las p¨¦rdidas mediante un impuesto local. Esto no significa que se cree un nuevo impuesto, sino que existe la posibilidad de que acudan a ¨¦l, aunque lo ideal ser¨ªa no utilizarlo?, manifest¨® ayer Florentino P¨¦rez, director general de Infraestructura del Transporte.

Impuesto local y no estatal

El hecho de que este impuesto tenga un car¨¢cter local es defendido por Florentino P¨¦rez, en el sentido de que ?el Estado no debe pagar a trav¨¦s de unos de sus impuestos como el de la gasolina, tal como han pedido los grandes ayuntamientos, el resultado de una gesti¨®n con la que puede no estar de acuerdo. Si la EMT, por ejemplo, quiere subir el sueldo a sus empleados por encima del resto del sector y aumentar su plantilla, no es l¨®gico que sea el Gobierno el que tenga que cargar con parte del d¨¦ficit?.El nuevo impuesto que propone el proyecto tendr¨ªa como l¨ªmite el 0,5% de la base imponible sobre el valor catastral atribuido a la vivienda a efectos de contribuci¨®n territorial urbana y ser¨ªa pagado por todos los que habitaran las viviendas, fueran propietarios o inquilinos de las mismas.

En el caso de Madrid, si se llevara a efecto la ley tal como figura en el proyecto, el tipo de gravamen tendr¨ªa que situarse en torno al 0,4% de la base imponible del valor catastral, fijado el pasado a?o en 934.500 millones de pesetas.

Este impuesto podr¨ªa ser cobrado aun en el caso de que, como parece probable, se llegara a firmar un convenio para crear en Madrid y Barcelona consorcios de transportes. En el de Madrid, seg¨²n manifest¨® Florentino P¨¦rez, tendr¨ªan que estar representados el Estado, la Diputaci¨®n Provincial y el Ayuntamiento de Madrid, lo que permitir¨ªa coordinar la EMT, el Metro, Renfe de cercan¨ªas y los autobuses interurbanos.

La planificaci¨®n, la coordinaci¨®n y la gesti¨®n de estos transportes beneficiar¨ªa a los usuarios; entre las mejoras econ¨®micas, estar¨ªa la utilizaci¨®n de billetes combinados.