Polonia y la URSS

( ... ) Los l¨ªderes sovi¨¦ticos cometen un error al criticar la personalidad o la incompetencia doctrinal del equipo Kania-Jaruzelski para una r¨¢pida transformaci¨®n del partido. Estos l¨ªderes se hicieron cargo del poder cuando se derrumbaba la autoridad del r¨¦gimen. El restablecimiento de cierto control central fue, de hecho, un notable resultado, pero que requer¨ªa una significativa adaptaci¨®n al movimiento del esp¨ªritu de Solidaridad. .Unos l¨ªderes m¨¢s dogm¨¢ticos se habr¨ªan ido a pique. Permitir la democracia en el partido y la descentralizaci¨®n era el precio necesario para restaurar la paz social y la forma de preservar el paragolpes polaco entre el Ej¨¦rcito sovi¨¦tico y una poblaci¨®n polaca hostil.Ser¨ªa demasiado esperar gratitud por parte de los dirigentes soivi¨¦ticos por esta audaz operaci¨®n, pero tal vez el resultado se imponga en el Kremlin de Breznev.

Har¨¢ todo lo que pueda para desviar la evoluci¨®n del partido polaco, alternando cartas amenazantes y maniobras militares. Pero si lleva este juego demasiado lejos y desequilibra la balanza en el comit¨¦ ejecutivo del partido polaco contra la flexibilidad y el dogmatismo, se llegar¨¢ a esa confrontaci¨®n directa que con tanta prudencia ha tratado de evitar. Es mejor para Rusia dejar que Polonia sea Polonia.

17de junio