"La flor de la pita"

He le¨ªdo, con atenci¨®n el art¨ªculo La flor de la pita, de Jos¨¦ Mar¨ªa de Areilza. No hace sino satisfacerme que desde las altas esferas del periodismo lleguen de cuando en cuando recuerdos para el mundo de las plantas, en el que trabajo, y que ha permitido la evoluci¨®n del hombre, su alimentaci¨®n y su vestido desde tiempos muy remotos. Que un intelectual como Areilza se acerque al mundo vegetal, estudie (s¨ªquiera superficialmente) con ojo curioso las plantas y su comportamiento, y transmita sus observaciones a los lectores es algo importante, al tiempo que infrecuente, y que enlaza con la tradici¨®n humanista de algunos bot¨¢nicos espa?oles (Lagasca, entre ellos) y de muchos escritores de fama universal. Gide, Neruda, Proust, Rilke son unos pocos ejemplos espigados al azar. Y no son los ¨²nicos.Sin embargo, debo decir que me ha dejado perplejo, y citando a Areilza "me ha llamado la atenci¨®n" la ¨¦poca de la floraci¨®n del magnolio. En efecto: el prestigioso diplom¨¢tico cita el invierno como el momento en que aparecen las flores de dicho ¨¢rbol pero mi experiencia y mis conocimientos me dicen que el magnolio americano (Magnolia grandiflora) florece en la ¨¦poca preestival, aproximadamente entre junio y julio. Otro magnolio muy utilizado en jardineria (Magnolia soulangeana) podr¨ªa aproximarse a la ¨¦poca invernal, ya que su floraci¨®n se produce en los principios de la primavera./