R¨¦plica a Miguel Barnet
En una entrevista publicada en EL PAIS el 4 de noviembre, el escritor cubano Miguel Barnet dijo que C¨¦sar Leante "era un escritor extremista, y a m¨ª no me sorprendi¨® nada su exilio, porque detr¨¢s de todo extremista hay un oportunista".Cierto siempre fui un extremista, esto es, un apasionado de la revoluci¨®n. Cre¨ª en ella ciegamente y por ella estaba dispuesto a sacrificarlo todo. No conceb¨ªa que alluien no la sintiera con la misma intensidad, como Miguel Barnet, por ejemplo. Extremismo y pasi¨®n que me llevaron, en los propios comienzos de 1959, a cambiar mi puesto de escritor radial, en el cual percib¨ªa una remuneraci¨®n de quinientos pesos mensuales, por el de periodista del diario Revoluci¨®n, con un salario de 150; extremismo y pasi¨®n que me hicieron vestir el pantal¨®n verde olivo y la camisa azul de miliciano y combatir a los alzados del Escambray y estar en el frente de batalla de Playa Gir¨®n, lugares que ni de lejos conoci¨® Miguel Barnet. ?D¨®nde s¨ª estuvo este escritor "revolucionario"? En las capillitas, en el intrigante mundillo literario, para traicionar, primero, a los miembros de la editorial El Puente, que dirig¨ªa el poeta Jos¨¦ Marlo (que, mientras cumpl¨ªa condena en la UMAP, ¨¦l, Miguel Barnet, declaraba en el extranjero que en Cuba no se persegu¨ªa a los homosexuales), y m¨¢s tarde a Heberto Padilla. ?No recuerda Miguel Barnet, cuando fue a ver a Adolfo Mart¨ª, director de literatura del Consejo Nacional de Cultura, para decirle que ¨¦l no ten¨ªa nada que ver con Padilla, despu¨¦s de haber sido visita casi diaria de su casa (el propio Padilla lo refiere en una poema)? ?No recuerda que al crearse el Ministerio de Cultura
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R¨¦plica a Miguel Barnet
Viene de la p¨¢gina 11repiti¨® la misma bajeza ante el nuevo funcionario de literatura, Sergio Chaple? ?Qui¨¦n es entonces el oportunista? Yo, que vivo estrechamente en el exilio por mi pasi¨®n, mi extremismo -incapaz de soportar la quiebra moral del sistema en que cre¨ª-, con mi familia en Cuba, sin saber qu¨¦ ser¨¢ de ella, pero temiendo lo peor, o ¨¦l, que paga la posici¨®n que ocupa -su triste posici¨®n, la migaja que le dejan caer- con el servilismo m¨¢s abyecto hacia Nicol¨¢s Guill¨¦n, a quien ni siquiera en el exterior deja de lamer en una entrevista period¨ªstica?, ?Quiere responder a esta pregunta Miguel Barnet? ?Qui¨¦n es el oportunista.?/
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