Juan Pablo II ofrece un apoyo condicionado a la DC italiana
Juan Pablo II se ha entrevistado inesperadamente con los l¨ªderes conservadores de la Democracia Cristiana italiana (DC) Amintore Fanfani, presidente del Senado, y Flaminio Piccoli, actual secretario general del partido. Estas dos conversaciones, que se desarrollaron por separado, han causado un fuerte impacto pol¨ªtico, ya que se producen en v¨ªsperas del Consejo Nacional de la DC y en un momento en que este partido afronta una grave crisis en su seno. Seg¨²n las primeras filtraciones sobre las entrevistas, el Papa ha ofrecido, al parecer, un apoyo condicionado a la DC.
Estas audiencias de Juan Pablo II a los l¨ªderes de la Democracia Cristiana han sorprendido, porque exist¨ªa la certeza de que este Papa no italiano iba a mantenerse neutral en la pol¨ªtica interna de este pa¨ªs. Ahora, la certeza se ha transformado, por lo menos, en una grave duda.El Papa convers¨® con Piccoli, a puerta cerrada, durante m¨¢s de una hora, despu¨¦s de haberle permitido asistir a su misa en la capilla privada de los apartamentos papales, y de haber desayunado ambos con el secretario de Estado del Vaticano, el cardenal italiano Agostino Cassaroli, y el vicario de Roma, cardenal Ugo Poletti.
Estas inesperadas entrevistas personales del papa Woityla con los dos l¨ªderes democristianos han despertado gran inter¨¦s pol¨ªtico porque el d¨ªa 25 comienza en Roma el Consejo Nacional de la Democracia Cristiana, al que se le atribuye gran importancia, ya que deber¨¢ preparar la asamblea nacional y debatir la posibilidad de una refundaci¨®n del partido ante las presiones de la base y de las asociaciones cat¨®licas. Estos grupos han llegado a amenazar con crear un nuevo partido cat¨®lico.
Etiqueta de cristiano
El inter¨¦s suscitado por los encuentros del Vaticano reside tambi¨¦n en la gran impresi¨®n causada por las ¨²ltimas declaraciones de los obispos italianos y las efectuadas en el congreso nacional de las asociaciones cat¨®licas del pa¨ªs. En ambos casos se dijo abiertamente que los cat¨®licos italianos no estaban ya dispuestos a votar a un partido por el mero hecho de que lleve la etiqueta de cristiano si despu¨¦s su actuaci¨®n no es fiel a este tipo de inspiraciones ideol¨®gicas.La noticia de las entrevistas de Fanfani y Piccoli con el Papa, que tuvieron lugar el lunes y martes pasados, deb¨ªa haberse mantenido en el m¨¢s estricto secreto. Pero, curiosamente, la informaci¨®n ha sido difundida por c¨ªrculos vaticanos. Tanto en la sede de la Democracia Cristiana como en la redacci¨®n de Il Popolo, ¨®rgano oficial del partido, no ten¨ªan la menor informaci¨®n al respecto. De las pocas indiscreciones que se han filtrado, se ha podido saber s¨®lo que el papa Wojtyla ha ofrecido su apoyo a la Democracia Cristiana, pero con dos condiciones: que se empe?e m¨¢s a fondo en la defensa de la paz y en la llamada "cuesti¨®n moral". S¨®lo en este caso el Papa no tomar¨¢ en consideraci¨®n el posible nacimiento de otro partido cat¨®lico. Mientras tanto, ha asegurado a los dos l¨ªderes democristianos que no apoyar¨¢ el voto de los cat¨®licos hacia ning¨²n otro partido.
Por lo que se refiere a la "cuesti¨®n moral", el Papa ha tenido presente los esc¨¢ndalos en los que se han visto envueltos los dirigentes democristianos, sobre todo en materia financiera, la cuesti¨®n del aborto y el caso de la logia mas¨®nica Propaganda Dos (P-2). Con relaci¨®n a este ¨²ltimo esc¨¢ndalo, la DC ha absuelto a cuantos declararon, ¨²nicamente bajo palabra, que no hab¨ªan dado nunca su nombre a la logia clandestina de Licio Gelfi, ante el cual, acaba de decir el ex presidente del Gobierno, Giulio Andreotti, "vi arrodillarse hasta al general Per¨®n durante una cena".
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