Demoras judiciales
NADA MENOS que cuatro a?os han sido necesarios para que la Audiencia Nacional haya dictado auto de procesamiento contra los componentes de un grupo ultraderechista que hizo estallar una bomba en la revista El Papus y caus¨® la muerte del conserje, adem¨¢s de varios heridos. Las sucesivas negativas del juez instructor a dictar auto de procesamiento contra los detenidos por la polic¨ªa como presuntos autores dio lugar a que se le abriera un sumario por retraso malicioso en la Administraci¨®n de justicia, finalmente sobrese¨ªdo; pero el resultado es esta llamativa demora, de la que resulta dif¨ªcil no sustraer significado.Con una reiteraci¨®n que s¨®lo acaso cabr¨ªa atribuir al azar, los actos delictivos cometidos por presuntos integrantes de la ultraderecha registran en sus tr¨¢mites judiciales un camino lleno de interrupciones y aplazarnientos. El caso de El Papus es uno de ellos, pero tambi¨¦n cabr¨ªa referirse a la larga espera para el procesamiento de Mart¨ªnez Loza, acusado de la muerte de Yolanda Gonz¨¢lez, y a otros de menor resonancia.
Una suerte de laberintos adicionales parece introducirse en la ya de por s¨ª lenta y compleja maquinaria judicial espa?ola, Y es tambi¨¦n notable c¨®mo en la mayor¨ªa de estos supuestos los retrasos se producen en los escalones inferiores del poder judicial, al punto que resulta necesaria y ha sido decisiva la intervenci¨®n de las instancias m¨¢s altas. Una intervenci¨®n que sin duda contribuye a neutralizar, si bien con excesivas demoras, las posibles suspicacias que en todo Estado de derecho nunca debiera despertar la justicia.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.