Grave crisis pol¨ªtica en Dinamarca tras la derrota electoral socialdem¨®crata

El Partido Socialdem¨®crata (PSD) dan¨¦s perdi¨® nueve esca?os (pasando de 68 a 59) en las elecciones legislativas anticipadas, celebradas el martes en Dinamarca y Groenlandia. El Partido Socialista Popular, situado a su izquierda, gan¨® nueve esca?os, otros nueve fueron para el Partido del Centro Democr¨¢tico, y cuatro para los conservadores. La fragmentaci¨®n del voto ha colocado al pa¨ªs en la situaci¨®n pol¨ªtica m¨¢s dif¨ªcil de su historia reciente.

Anker Jorgensen, primer ministro socialdem¨®crata durante los ¨²ltimos seis a?os, present¨® ayer su renuncia a la reina Margarita II, que hoy comenzar¨¢ sus entrevistas con los dirigentes de los principales partidos, para encargar a uno de ellos la formaci¨®n de un nuevo Gobierno, tarea que se presenta plagada de dificultades.En el nuevo cuadro pol¨ªtico dan¨¦s no parece que la adscripci¨®n de Dinamarca a la OTAN y a la Comunidad Econ¨®mica Europea (CEE) vayan a ser cuestionadas. Sin embargo, los resultados electorales en la regi¨®n aut¨®noma de Groenlandia permiten prever que el electorado de la isla n¨®rdica polar, que acudir¨¢ a una consulta espec¨ªfica sobre este tema en febrero del pr¨®ximo a?o, se inclina por el abandono de la CEE.

El Partido Socialdem¨®crata se ha visto erosionado en primer t¨¦rmino por una crisis econ¨®mica que el Gobierno minoritario de Anker Jorgensen no pudo enfrentar con ¨¦xito, y tambi¨¦n por debilidades ideol¨®gicas y contradicciones internas manifiestas en el ¨²ltimo congreso del partido.

Parece evidente, y as¨ª lo expres¨® Jorgensen la noche misma de la elecci¨®n, que el Partido Socialista Popular que encabeza un joven intelectual marxista, Gert Petersen, ha recogido buena parte de los votos perdidos por el PSD.

A diferencia de lo ocurrido en Suecia en las dos ¨²ltimas elecciones, y m¨¢s recientemente en Noruega, el descontento ha virado en busca de soluciones m¨¢s radicales por la izquierda. Si este partido izquierdista, con una trayectoria relativamente corta, nutrido con aportaciones de sectores feministas, ecologistas y antinucleares, estar¨¢ en condiciones de asumir una eventual coparticipaci¨®n en una alternativa de Gobierno socialista, constituye una inc¨®gnita.

El otro triunfador neto de la elecci¨®n es el Partido de Centro Democr¨¢tico, una escisi¨®n de la socialdemocracia, que tambi¨¦n ha aumentado en nueve sus esca?os en el Parlamento.

En el bloque burgu¨¦s, si bien el partido conservador gana cuatro esca?os, el Venstre (izquierda) -un seguro aliado de haber existido una mayor¨ªa para formar Gobierno- perdi¨® un esca?o. El gran perdedor de la derecha fue, sin embargo, el abogado Mogens Glistrup, l¨ªder del Partido del Progreso, a quien la condena por defraudador de impuestos no le dio evidentemente la aureola de m¨¢rtir que ¨¦l esperaba.