La Orquesta Nacional podr¨¢ contratar profesores extranjeros

La Orquesta Nacional podr¨¢ contratar profesionales extranjeros, a falta de espa?oles de la misma especialidad, hasta un m¨¢ximo del 10% de la plantilla. Esta fue una de las novedades, posiblemente pol¨¦mica, dadas a conocer por Garc¨ªa Barquero, director general de m¨²sica y teatro, en su reuni¨®n con los cr¨ªticos musicales madrile?os celebrada el viernes en el teatro Real, y en la que intervinieron tambi¨¦n Jes¨²s L¨®pez Cobos, director asociado de la ONE; Tom¨¢s Marco, director gerente del organismo aut¨®nomo Orquesta y Coro Nacionales de Espa?a, y los asesores Ram¨®n Barce, Franco-Gil y G¨®mez Amat.

La medida forma parte de un plan de conjunto cuyo aspecto m¨¢s importante es, sin duda, la futura incorporaci¨®n de L¨®pez Cobos a la plena titularidad de la ONE. Titularidad que de hecho viene desempe?ando desde su nombramiento como director asociado, aun cuando el n¨²mero de conciertos que dirija sea reducido, dados los compromisos anteriores del maestro y, muy especialmente, su dedicaci¨®n, desde finales de agosto pasado, al puesto de director musical de la Opera de Berl¨ªn."Seg¨²n est¨¢ previsto en su vigente compromiso, L¨®pez Cobos tomar¨¢ una decisi¨®n definitiva a finales de agosto de 1982, cuando termine su primera temporada berlinesa, que le ocupa seis meses anuales y en la que dirige cuarenta funciones de un total de m¨¢s de trescientas, aunque tenga responsabilidad sobre todas las actividades del primer teatro l¨ªrico de la Rep¨²blica Federal de Alemania.

De todos modos, a fin de reforzar la orientaci¨®n y el trabajo permanente de la Orquesta y Coro Nacionales, a partir de la pr¨®xima temporada ser¨¢ principal director invitado el maestro Peter Maag (San Gallo, Suiza, 1919), de gran prestigio internacional, que ha desempe?ado la titularidad de una serie de grandes teatros oper¨ªsticos (Biel, D¨¹sseldorf, Viena, Bonn y Venecia, entre otros) y que contribuy¨® a la formaci¨®n de Jes¨²s L¨®pez Cobos.

Otras informaciones han sido ya recogidas en esta secci¨®n (EL PA?S, 28 de noviembre), como las referidas a las oposiciones, infraestructura del organismo aut¨®nomo, dimisi¨®n -por terminaci¨®n de contrato- del director del Coro, Jos¨¦ de Felipe, sustituido por el catal¨¢n Enric Rib¨®, proyecto de construcci¨®n de un auditorio nacional en la prolongaci¨®n de Pr¨ªncipe de Vergara (podr¨ªa inaugurarse en 1985), y confecci¨®n del Reglamento de R¨¦gimen Interior de la Orquesta, primero que tendr¨¢ desde su fundaci¨®n por orden ministerial de. 12 de junio de 1940, sin contar la breve historia de la otra Orquesta Nacional, creada por decreto del Ministerio de Instrucci¨®n P¨²blica de 28 de octubre de 1937, primera de nuestra historia y, en tantas cosas -empezando por su director, Bartolom¨¦ P¨¦rez Casas-, antecesora de la actual.

El maestro L¨®pez Cobos se refiri¨® a su prop¨®sito de modificar la l¨ªnea de programaci¨®n y actividades de la Orquesta Nacional, en un sentido m¨¢s actual y, por lo mismo, menos conservador, huyendo del gran abono fijo a una serie de conciertos sujetos, casi por completo, a un mismo patr¨®n. Como se hace por tantas entidades del exterior, los ciclos de abono y programas especiales responder¨¢n a criterios ideol¨®gicos antes que al mero imperativo de simple regularidad y periodicidad, principios que se aplicar¨¢n igualmente a las actividades acogidas hoy al Ciclo de C¨¢mara y Polifon¨ªa.En el orden que pudi¨¦ramos calificar de anecd¨®tico, se inform¨® de la renovaci¨®n de material instrumental (pianos, clave, timbales, como ingl¨¦s, etc¨¦tera) e incluso de la sustituci¨®n de las sillas, que estar¨¢ ultimada el pr¨®ximo mes de enero.

En cuanto a la incorporaci¨®n de instrumentistas extranjeros, ha de darse la circunstancia de que no se cubran plazas en las correspondientes oposiciones, y, por supuesto, los posibles profesores tra¨ªdos de fuera nunca tendr¨¢n consideraci¨®n de funcionarios, sino que estar¨¢n sujetos a r¨¦gimen de contratos por per¨ªodos determinados.

Junto a la labor de concierto, Garc¨ªa Barquero aludi¨® al proyecto de grabaciones discogr¨¢ficas de m¨²sica espa?ola por parte de la Orquesta y Coro Nacionales, actividad cada vez m¨¢s necesaria, cuando las casas productoras se muestran cada vez m¨¢s renuentes a la impresi¨®n de un repertorio cuyo alto coste de producci¨®n no est¨¦ compensado, en plazo corto o medio, por los ingresos de venta. Ahora mismo, la grabaci¨®n que deb¨ªa hacer Jes¨²s L¨®pez Cobos de Atl¨¢ntida, de Falla-Halffter (versi¨®n de Lucerna) ha sido demorada por dichas circunstancias. Y es un hecho cierto que ni siquiera en el caso de Manuel de Falla (autor de una obra intensa, pero no extensa) existe una integral a cargo de int¨¦rpretes nacionales, en abierto contraste con lo que sucede en Hungr¨ªa con la larga creaci¨®n de B¨¦la Bartok. Se hace necesario entonces el patrocinio total o parcial, la producci¨®n o coproducci¨®n, para sacar adelante y difundir por el mundo la obra de nuestros maestros de ayer y de hoy.