Apoyo masivo del PCI a las cr¨ªticas de Berlinguer contra la URSS

Enrico Berlinguer, secretario del Partido Comunista italiano (PCI), ha salido vencedor en la reuni¨®n del comit¨¦ central, que hab¨ªa sido convocada pr¨¢cticamente para responder a las acusaciones que le hab¨ªa formulado el l¨ªder filosovi¨¦tico del partido, Francesco Cossutta, quien ha vuelto a repetir sus acusaciones criticando al secretario de juzgar con ¨®ptica racionalista burguesa y sociol¨®gica" a los pa¨ªses del socialismo real.Pero Cossutta se ha quedado en clara minor¨ªa. Ni siquiera los dirigentes intermedios del partido le defendieron. Y Pietro Ingrao, otra de las figuras m¨¢s prestigiosas del partido y que, como Cossutta, tiene tambi¨¦n mucho prestigio entre los militantes, le atac¨® igualmente dici¨¦ndole que la Uni¨®n Sovi¨¦tica es un Estado desp¨®tico" y que el modelo del socialismo real, "zarandeado por una crisis de dimensiones mundiales, se ha convertido en una fuente de burocratismo y de una nueva forma de alienaci¨®n "de los trabajadores".

El llamado "hombre de Mosc¨²", as¨ª pues, perdi¨®. Pero Cossutta ha aceptado el juego del centralismo democr¨¢tico interno del partido y asegur¨® que no provocar¨¢ rupturas ni escisiones, aunque, eso s¨ª, seguir¨¢ afirmando que Berlinguer "ha sido injusto con la URSS y conn la Revoluci¨®n de Octubre".

La reacci¨®n m¨¢s importante a las nuevas posiciones del PCI, de clara del golpe polaco y de alejamiento deI socialismo de a Uni¨®n Sovi¨¦tica, ha llevado a la izqui¨¦rda de la Democracia Cristiana, que hab¨ªa perdido en el ¨²ltimo congreso, y a su secretario, Benigno Zaccagnini, a levantar la cabeia.

Uno de los l¨ªderes m¨¢s prestigiosos de la izquierda democristiana, Giovanni Galloni, afirm¨® que la nueva fase del partido comunista vuelve a proponer el problema de los prejuicios que a¨²n perduran contra la posibilidad de que los comunistas puedan participar directamente al Gobierno, y pidi¨® que el problema se plantee en el pr¨®ximo congreso nacional democristiano, que se celebrar¨¢ en Bari.

Al parecer, Berlinguer asistir¨¢ a este congreso, y en ¨¦l se podr¨ªa resolver la famosa "cuesti¨®n comunista italiana", ya que el problema sig¨¹e siendo, sobre todo, el no de la Democracia Cristiana a la plena legitimidad del PCI como fuerza de Gobierno.